Ir al contenido principal

Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

Entrevista con el corrupto

Desde que tengo memoria, siempre quise ser un corrupto. Los admiraba, eran mi ejemplo a seguir. El mundo pertenecía a los corruptos, no tenía ninguna duda. Y yo quería ser parte de este grupo de personas, quería vivir bien, vivir sin esfuerzo. ¿Para qué trabajar, si otros ya lo hacían para mí?


La gente vulgar disimula su fracaso tras códigos éticos, moralinas, religiones y otras pamplinas. Eso son tonterías, simplemente no se atreven a dar el paso, un simple paso. 


Porque para ser totalmente corrupto hay que valer y tener ganas de serlo. Y digo totalmente corrupto, porque la chusma también es corrupta, pero no se atreven a serlo hasta sus últimas consecuencias. Quedarse a medias se paga, se paga con una vida gris y aburrida. Yo no quería eso, ser corrupto me ha otorgado un gran poder. No sólo dinero, no. Es más que eso, es la sensación de poder, la sensación de que puedes comprar y doblegar cualquier voluntad. Es algo divino… o demoniaco. Allá cada cual si cree en dioses o demonios. 

Entrevista con el corrupto
Entrevista con el corrupto
¿Sabes que la gente común no me merece ningún respeto? No se respetan a sí mismos. Dicen “a mí no me compran con nada”. Menuda gilipollez, todo el mundo tiene un precio, y no siempre tiene que ser en dinero. Si aun no te han comprado es porque no vales el esfuerzo de hacerlo, no eres nada, ni siquiera para perder el tiempo contigo. Por eso eres incorruptible, eres un cero a la izquierda, no mereces la pena, nada me ofreces que me interese. Por eso aun eres honrado. ¿Te atreverías a que te tentara?

Un buen corrupto – y yo lo soy – sabe como inclinar voluntades a su beneficio con cualquier medio: sexo, orgullo, envidia, vanidad, honores, status,… la lista es casi infinita. A veces, algunos me han asombrado por la forma en que cayeron. Todos caen, no suelo fallar. Aunque he de reconocer que a veces he conocido algunas personas que no he logrado corromper: me merecen mí respeto, suelo ser casi infalible corrompiendo a la gente, soy un profesional de la corrupción. 

No existiríamos los corruptos si la gente no lo permitiera. ¿Y cómo nos lo permiten? Pues poniendo su parte, su pequeña parte en la corrupción o simplemente, no haciendo nada. Da igual que sean cultos o incultos, poderosos o pordioseros, laicos o creyentes, todos pueden ser corrompidos. Y luego se quejan, es patético e hipócrita. Por lo menos, yo soy sincero.

Algún imbécil dice que la conciencia no le permitiría dormir si se convirtiera en un corrupto como yo. Menuda gilipollez, duermo a pierna suelta, mi conciencia está muy tranquila y vivo feliz. No hago nada que no haga toda la sociedad.

No podría vivir como ellos, los que van de puritanos. No podría vivir su vida gris, su rutina, su vacío, su engaño, su falta de poder sobre los demás. 

Soy un corrupto y no sé hacer otra cosa. Y me encanta. ¿Te gustaría probar?

También le puede interesar:

Comentarios

  1. Mira que hasta me dieron ganas...Parece no ser complicado, siempre que no te pillen...Montas una trama estilo gurtel o los fondos de reptiles y te jubilas sin haber trabajado en la empresa...Y además te regalan un bolso gucci...o el otro que no se escribir el nombre.

    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero somos gente simple, Manuel, por eso madrugamos, hacemos (o hicimos) guardias, dormimos tranquilos y somos gente gris

      Saludos

      Eliminar
    2. corrupto sos
      honrado o no los sos

      Eliminar
  2. jajjj qué bueno, he de reconocer que muchos de esos pensamientos rondaron mi magin. De todos modos algun@s se quitan esa caspa de encima intentando ser "diferentes", que lo consigan ya es harina de otro costal. Muy bueno. Bss.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Había que ponerse en el lugar de un corrupto e intentar pensar como uno de ellos. En el fondo, todos somos "corruptibles" y con algo de caspa.

      Saludos, emejota

      Eliminar
  3. Todo depende del volumen de lo robado. Si robas cuatro mil euros eres un vulgar ladrón. Si estafas por valor de cuatro millones eres uno de esos que salen en la tele, con el mentón levantado y la conciencia tranquila.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es, Cayetano. por lo tanto, si vas a hacer un pufo o te vas a pringar, que sea a lo grande

      Saludos

      Eliminar
  4. No podrìa, yo sì tengo conciencia como para andar haciendo esas cosas.

    ResponderEliminar
  5. Se suele dar un binomio curioso y es que el que no es corrupto, no suele serlo suficientemente valiente y por eso el corrupto triunfa.
    En todo caso no se debería tomar el tema a la ligera porque actualmente ES EL PROBLEMA DE LA HUMANIDAD y amenaza su existencia mas que el cambio climático.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La pregunta del barbero

Un hombre llamado Juan asomó la cabeza en la barbería de Paco y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar para un corte de pelo?" Paco, mirando la tienda llena de clientes, respondió: "Unas dos horas." Juan se marchó. Unos días después, Juan volvió a asomarse y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar hoy para un corte de pelo?" Paco, observando la tienda, dijo: "Unas tres horas." Juan se fue nuevamente. Una semana más tarde, Juan regresó y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar hoy para un corte de pelo?" Paco, revisando la tienda, respondió: "Unas hora y media." Juan se marchó una vez más. Paco, intrigado, se volvió hacia su amigo Luis y le dijo: "Oye, Luis, hazme un favor. Sigue a Juan y mira a dónde va. Siempre pregunta cuánto tiempo tiene que esperar, pero nunca regresa."  Ver Las 20 leyes de la astucia Un rato después, Luis regresó a la barbería, riéndose a carcajadas. Paco, curioso, preguntó: "¿...

El profesor y la alumna en privado

El profesor Johnson se encontraba absorto en sus papeles cuando unos suaves golpes en la puerta lo sacaron de su concentración. "Adelante", dijo sin levantar la vista. La puerta se abrió y se cerró rápidamente. El sonido de tacones sobre el suelo de madera lo hizo alzar la mirada. Allí estaba Emily, una de sus estudiantes más problemáticas, acercándose a su escritorio con una mirada que lo puso inmediatamente en alerta. Emily se inclinó sobre el escritorio, su blusa entreabierta revelando más de lo apropiado. El profesor Johnson contuvo la respiración, incómodo ante la situación.  "Puedo hacer lo que quieras", susurró Emily con voz temblorosa, "pero por favor... cambia mi última calificación. Lo necesito, o la administración me expulsará".  Ver Las 20 leyes de la astucia El corazón del profesor Johnson se aceleró, no por deseo, sino por compasión y preocupación. En los ojos de Emily vio desesperación, no seducción. Con calma, se levantó y abrió la puerta. ...

Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

El motivador cuento de la hormiga y la miel

El motivador cuento de la hormiga y la miel cautiva con su poderosa enseñanza: la moderación da paz, el exceso consume. Una gota de miel cayó al suelo. Una hormiguita, atraída por su dulzura, se acercó y la probó.  La miel era tan deliciosa que no pudo resistir la tentación de volver. Tomó otro sorbo, luego otro, cada vez más hechizada por este néctar divino . Pero pronto, la hormiga, insaciable, quería más. Decidió sumergirse por completo en la gota de miel, bañarse en ella, perderse en ella. Se sumergió, se envolvió, se ahogó. ¡Ay! La miel, tan dulce, se convirtió en su prisión. Sus patitas, pegajosas, ya no podían moverse. Luchó, luchó, pero en vano. La miel, lentamente, la rodeó, la inmovilizó, la asfixió. Y la hormiga, prisionera de su propia gula, pereció en esta dulzura mortal. Los Sabios dicen: "El mundo es solo una enorme gota de miel". El que se contenta con probarlo con moderación encuentra la paz. Pero el que se sumerge en ella, codicioso e insaciable, es tragad...

El médico chino

Un médico chino no puede encontrar trabajo en un hospital en EE. UU., así que abre su propia clínica. Pone un letrero afuera que dice: "TRATAMIENTO POR $20 - SI NO SE CURA, RECUPERE $100. " Un abogado estadounidense piensa que esta es una gran oportunidad para ganar $100 y va a la clínica. Abogado: "He perdido mi sentido del gusto." Médico chino: "Enfermera, traiga la medicina de la caja Nº 14 y ponga 3 gotas en la boca del paciente." Abogado: "¡Puaj! Esto es queroseno." Médico chino: "Felicidades, su sentido del gusto está restaurado. Deme mis $20." El abogado, molesto, regresa unos días después para intentar recuperar su dinero. Abogado: "He perdido la memoria. No puedo recordar nada." Médico chino: "Enfermera, traiga la medicina de la caja Nº 14 y ponga 3 gotas en su boca." Abogado (molesto): "Esto es queroseno. Me diste esto la última vez para restaurar mi gusto." Médico chino: "Felicidades. Ha rec...