Gaviota Una gaviota descendió en un suburbio de la capital de Lu. El marqués de Lu le dio la bienvenida y la festejó en el templo, disponiendo para ella la mejor música y los más importantes sacrificios. Pero la gaviota estaba aturdida y parecía bien triste, no atreviéndose a tragar un bocado de carne o una sola copa de vino. Al cabo de tres días, murió. El marqués de Lu agasajó a la gaviota como a él le gustaba ser agasajado y no como a ella le habría gustado. Zhuang Zi http://www.elartedelaestrategia.com/zhuang_zi.html El Arte de la Estrategia tusbuenoslibros
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