Ir al contenido principal

Buscador

La escopeta nacional, como siempre


Poco después de morir Franco, en 1977, se estrenó la película “La escopeta nacional” que retrataba toda una clase social y toda una época a través de una delirante cacería.

La escopeta nacional. Ex-ministro Bermejo
La escopeta nacional. Ex-ministro Bermejo

Hasta hace poco, la foto más parecida era la de un Ministro de Justicia del anterior gobierno posando junto a muchos venados abatidos. 


La escopeta nacional. Franco
La escopeta nacional. Franco
Esta semana, un nieto del Rey se ha pegado un tiro en el pie con una escopeta de caza y el mismo monarca se ha roto una cadera en un safari de elefantes.

Con el chiquillo se han hecho infinidad de chistes como el de “se dispara la prima de riesgo y el nieto del rey”. Cachondeo que no nos falte. Con la regia cacería, las reacciones han sido más viscerales, sobre todo por el motivo de la crisis que está pegando muy fuerte y a los españolitos de este Reino no les hace mucha gracia el gasto de un safari que pagamos todos, ni matar elefantes, que como todos sabemos es un animal muy simpático y trae suerte (no como los pollos o los cerdos, que se pueden matar sin problemas de conciencia).
La escopeta nacional. Juez garzón
La escopeta nacional. Juez Garzón

No voy a citar mas a estas dos personas, ya se está escribiendo mucho sobre ellos y no creo que aporte nada nuevo. 

A mí no me gusta la caza. Conozco cazadores de escopeta y perro que pagan su coto, madrugan, pasan frio o calor según salga el día, patean el monte a conciencia y muchos días vuelven sin haber pegado un tiro. Algún día cazan algo de pelo o pluma que acaba guisado o en escabeche.  En general, no tengo casi nada contra este tipo de caza donde la pieza cobrada acaba en el puchero.

La escopeta nacional.  Rey Juan Carlos I
La escopeta nacional.
Rey Juan Carlos I
También he visto en persona monterías de caza mayor o desde puestos que esperan la caza que les levantan peones que hacen la batida. Eso es otra historia que no me gusta nada. No voy a describirlas, pueden ver la película “La escopeta nacional” o la de “Los Santos Inocentes”. Cuando veo a todo el pijerío después de la heroica hazaña de disparar contra las piezas y la foto con los “trofeos” me entra un ataque de mala leche donde lo más feliz que se me ocurre es ponerlos a ellos en el lugar de las piezas. Con cuernos, además.

La escopeta nacional.
Rey Carlos III
Pero me da que pensar. La lista cinegética es larga: Carlos III, Felipe III, Franco, Mario Conde, Juan Carlos I, el juez Garzón (el que quería extraditar a Pinochet), Putin, el ex ministro Bermejo y otros (y otras también) que se asombraría de saber que empuñan escopeta sin perro. ¿Qué tiene la caza mayor que atrae a tanta gente, en general, poderosa? ¿Lo tienen todo y quieren probar la sensación de liquidar un animal por la simple presión de un dedo en el disparador? ¿Como en la antigüedad era deporte de reyes, quieren sentirse como tales? ¿Esconde algún problema sexual no resuelto, véase gatillazo?

¿No se cansan de cazar? Pues les propongo algo más excitante y sencillo. En el coto de caza, formen dos bandos. Y cácense entre ustedes. En cuanto todo un bando sea cazado, háganse la foto, disequen las cabezas abatidas y las pongan en su salón encima de la chimenea.

Aunque me temo, que en cierta forma, los poderosos ya lo hacen. Desde hace siglos. ¿Adivina quienes son las piezas?

Comentarios

  1. La diferencia entre un político y sus majestades reales, es que del político te puedes librar si no le votas, pero al rey hay que comérselo con patatas.
    Por cierto, aparte de los "vitalicios" echo en falta algunos cazadores como Cascos o Fraga.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es Cayetano, no se salva ni drcha ni izqda. De los no "vitalicios", como tu dices, he puesto los últimos incorporados al tan selecto club.

      Saludos

      Eliminar
  2. Parece ser que hay que demostrara que somos la especie dominante.
    Tampoco estoy contra la caza. >He comido piezas de caza (baquiros, que son jabalíes más pequeños y guacharacas, una especie de gallinacea en sudamérica). En mis tiempo de estar trabajando en la selva comí serpiertes y caíman.

    Todo es comestible...con el elefante a lo mejor se la a muchos que no comen...Pero: Les llegaría esa carne??

    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. También yo he cazado, pero solo para comer. Cuando tienes hambre, te comes cualquier cosa. Ya se sabe: todo lo que nada, corre o vuela, a la cazuela.

      Saludos

      Eliminar
  3. Es lamentable ver estas cosas en esa época, pero lo bueno es ver que ya no se los aplaude como antes, y la mayoría sale a defender a esos pobres animales que no le hacen mal a nadie. Es la primera vez que en algo no estamos del todo de acuerdo, la verdad estoy empezando a dejar la carne, por una elección propia, pero en lo que sí estamos de acuerdo es que si cazan para comer, estaría bien pero sólo por el hecho de sacarse una foto y/o llevarlo de trofeo es deplorable. No entiendo como hay seres así pero lo importante es que la mayoría piensa lo mismo frente a estas atrocidades.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La testosterona

La testosterona es una hormona que se produce en los testículos de los hombres y en los ovarios de las mujeres, aunque en menor cantidad.  La testosterona es la hormona que regula el deseo sexual. Si tenemos en cuenta que las mujeres producen entre 0,1 y 0,4 mg al día frente a los hombres que lo hacen entre 5 y 7 mg diarios, entenderemos porque la mujer es más emocional y el hombre es más sexual. Ver  Suplementos de testosterona: todo lo que necesitas saber Normalmente la mujer pone el foco en el amor y el hombre en la sexualidad; por supuesto y como en todo, hay excepciones. Por este motivo la forma de llegar a la sexualidad de la mujer será darle muchos detalles de amor, mientras que al revés para que nazca el deseo de amar en un nombre será necesario que sexualmente se sienta satisfecho. Por supuesto esto no es una receta, ni debe ser una obligación, pero conocernos nos ayuda a entendernos y a satisfacernos. La testosterona es una hormona que se produce en los testículos de los homb

¿Eres de los que le pasa el plato al mesero?

Un gesto que algunos hacemos de forma natural, sin pensarlo. La publicación original fue escrita por el profesor y escritor Enrico Galiano BASADO EN UNA HISTORIA REAL. Serví como camarero durante once años. Entre las muchas cosas que he aprendido está, que el mundo se divide en dos categorías: 1.- los que pasan el plato al camarero, y 2.-los que no pasan el plato al camarero. Ver  Algunas reglas sociales que pueden ayudarte Los que te pasan el plato son los que te ven, se dan cuenta que estás ahí. Normalmente incluso dicen "GRACIAS, como si les estuvieran haciendo un favor. Un gesto gratis, no cuesta nada. Pero un gesto que lo dice todo. Siempre me han encantado los que te pasan su plato porque casi siempre son personas con humildad , reconocen tu dignidad, no tratan al camarero como a un siervo, saben cuánta suerte hay en estar sentados ahí comiendo y disfrutando. En mi vida me encontré en la mesa con mucha gente: escritores, políticos, a veces incluso personajes de televisión, y

La amante

Unos años después de que yo naciera, mi padre conoció a una extraña recién llegada a nuestro pequeño pueblo. Desde el principio, mi padre estaba fascinado con esa encantadora novata y luego la invitó a vivir con nosotros. La extraña aceptó y, sorprendentemente, ¡mi madre también! Mientras crecía, en mi mente joven, ella ya tenía un lugar muy especial. Mi madre me enseñó lo que era bueno y lo que era malo y mi padre me enseñó a obedecer. Pero la extraña era más fuerte, nos encantó durante horas hablando de aventuras y misterios. Ella siempre tenía respuestas a cualquier cosa que quisiéramos saber. ¡Sabía todo del pasado, del presente e incluso podía predecir el futuro! Lo molesto era que no podíamos estar en desacuerdo con ella. ¡Ella siempre tuvo la última palabra! Ella fue quien llevó a mi familia al primer partido de fútbol. Nos hizo reír y llorar. La extraña casi nunca dejaba de hablar, pero mi padre la amaba. Mi madre que incluso estaba celosa, nos dijo

Gemidos

Los gemidos de las mujeres durante el sexo se conocen como respuesta copulatoria femenina. Ver  10 verdades sobre el sexo de las que nunca hablamos La respuesta copulatoria femenina es, de hecho, un aspecto intrigante del comportamiento humano. Aunque es un fenómeno bien conocido, todavía hay desacuerdo sobre su ascendencia evolutiva. Según algunos académicos, podría haber evolucionado como un medio para que las mujeres indicaran su preparación para la actividad sexual y para mejorar sus probabilidades de tener hijos. Es interesante pensar que el sonido de los gemidos puede ser antiguo. Históricamente, a las mujeres se les ha exigido que permanezcan mudas durante el sexo en varias sociedades, ya que vocalizar el placer de una persona se consideraba inmoral o humillante. Sin embargo, la vocalización durante el coito se promovió activamente en algunas culturas, como la antigua China y Japón, como un método para mejorar la experiencia de ambos miembros de la pareja. Independientemente de

Te llevara 3 minutos leer y te servirá para toda la vida

Este es un ensayo de Viktor Frankl, neurólogo, psiquiatra, sobreviviente del holocausto y el fundador de la disciplina; que conocemos hoy como Logoterapia. No eres Tú, soy Yo... ¿Quién te hace sufrir? ¿Quién te rompe el corazón? ¿Quién te lastima? ¿Quién te roba la felicidad o te quita la tranquilidad? ¿Quién controla tu vida?... Ver  Cómo mejorar tu vida en 7 pasos ¿Tus padres? ¿Tu pareja? ¿Un antiguo amor? ¿Tu suegra? ¿Tu jefe?... ¿Culpables? Podrías armar toda una lista de sospechosos o culpables. Probablemente sea lo más fácil. De hecho sólo es cuestión de pensar un poco e ir nombrando a todas aquellas personas que no te han dado lo que te mereces, te han tratado mal o simplemente se han ido de tu vida, dejándote un profundo dolor que hasta el día de hoy no entiendes. Pero ¿sabes? No necesitas buscar nombres. La respuesta es más sencilla de lo que parece, y es que nadie te hace sufrir, te rompe el corazón, te daña o te quita la paz. Nadie tiene la capacidad al menos que tú le permi