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Con una brida. Increíble, no lo sabía. Es un invento británico, tal vez de Escocia y se utilizó entre los siglos XVI y XIX.
Este dispositivo se utilizaba para controlar, humillar y castigar a las mujeres chismosas y molestas amordazándolas.
La cosa se llama Scold Briddle, "Sreg" proviene de "regaño común": una molestia pública, en su mayoría mujeres, que habitualmente chismorreaban y discutían con sus vecinos, mientras que el nombre "brida" describe una parte que cabe en la boca.
La brida de juramento también se conocía como la "brida del chisme" y era comúnmente utilizada por los esposos para sus esposas regañadoras o maldecidas.
Era, por así decirlo, el freno de la vergüenza.
Fue hecho por herreros y era un dispositivo similar a una jaula hecho de hierro. Se adaptó a la cabeza de la mujer.
El tipo más simple consistía en una banda de hierro con una bisagra en el costado y una "pieza de lengüeta" que podía ser plana o con una espiga. Esto se puso en la boca de la mujer para mantener su lengua hacia abajo.
Otra banda de hierro pasaba por encima de la cabeza de la mujer, con la parte delantera moldeada de manera que la nariz quepa.
Dependiendo del diseño, la brida podía ser incómoda, dolorosa o insoportable, y las cicatrices en la lengua no eran infrecuentes. Algunas bridas tenían una campana unida a un resorte para que se pudiera escuchar al portador cuando se acercaba.
En algunas casas, había un gancho en la pared junto a la chimenea al que la esposa estaba encadenada hasta que prometía comportarse y contener su lengua.
Aunque a veces el carcelero local la imponía a una esposa fastidiosa a petición de su marido o del propio marido, la brida era a menudo también una medida punitiva ordenada por un magistrado.
Las bridas de la corte eran más elaboradas.
Siempre tenían al menos una picadura y podían cerrarse. También tenían una cadena unida al costado de la brida, con un anillo en el extremo.
Esto permitía que la mujer fuera humillada públicamente conduciéndola a través de la ciudad o empalándola en un lugar determinado durante un tiempo determinado. Dependiendo de la gravedad del delito, el período de tiempo durante el cual se usaba la brida podía oscilar entre 30 minutos y varias horas, durante las cuales no se permitía al delincuente comer ni beber.
También se dice que se usaba con las brujas para evitar que cantaran o hicieran magia.
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