Con la coronación del nuevo Rey Felipe VI, hubo un discurso y una recepción de personas en palacio. Tanto en el discurso como en la recepción faltaba un colectivo muy importante y numeroso. Muchas selfies de Padres de la Patria (hay que ser hortera, no solo por la foto, sino por publicarla en los medios), mucho análisis al milímetro del Real Discurso, muchos comentarios sobre modelitos de Reinas, Infantas y demás cortesanas, mucha tertulia y bla, bla, bla, pero nadie se fija en lo invisible El último año del siglo XX, España tenía 38 millones de habitantes. Ahora los hemos superado largamente llegando a 45 millones o más, gracias a la inmigración, de la que no voy a tratar si se asumió con orden y precisión centroeuropea o al improvisado modo celtibérico. El caso es que por la calle se ven muchas personas que hace 20 años nos hubieran parecido algo exótico. Y son españoles en su mayoría, con los papeles en regla, conviene no olvidarlo. El discurso del Rey a la gente in