Salvar el mundo Estamos viendo estas últimas semanas como la juventud quiere cambiar al mundo. Me parece muy bien, es lo normal en la juventud. Yo también fui joven y quise cambiar el mundo. Ahora que no lo soy tanto, ¿lo he cambiado? La respuesta es si. Y usted dirá, ¡vaya tipo más pretencioso! Pues le puedo contestar que he cambiado el mundo tanto como usted y como la persona más insignificante. Todos colaboramos. ¿Merece la pena cambiar el mundo? Y si hay que salvarlo, ¿de qué hay que salvar al mundo? En el Tao Te King leemos que “Aquellos que desean cambiar el Mundo/ De acuerdo con sus deseos / Nunca tienen éxito” y creo que tiene cierta razón. Así que le voy a contar la que creo es la forma ideal de salvar el mundo. Para variar, también la idea viene de China : “antes de salir a salvar el mundo date tres vueltas por tu casa”. Si te cambias a ti mismo, tal vez seas capaz de cambiar a tu familia. Y si lo consigues, lograrías cambiar a tu pueblo; y así, sucesivam