Siempre me ha quedado la duda de si Bin Laden, ese HDP con cara de santón, planeó todo para que toda la OTAN y allegados se fueran a Afganistán a librar una guerra inganable que desgastara a nuestros países y diera ánimos a su bando radical-musulmán.
He de reconocer que su planteamiento es original en cuanto a su gran flexibilidad en usar estrategias y tácticas ya conocidas, pero de forma inusual.
Los alucinados asesinos de Dios |
Desde que ocurrió la noticia de entrar a degüello contra un soldado en la retaguardia de la OTAN (léase Londres y París) sólo citar que simplemente se está usando una táctica que consiguió muchos éxitos en el pasado. Me refiero al terrorismo nihilista y selectivo de la secta de los asesinos. Por cierto, recordar que la palabra asesino viene de la palabra hachís, gracias a que estos personajes tan simpáticos que veían el paraíso cuando estaban hasta el culo de esta sustancia y luego suspiraban constantemente volver a este lugar, aunque fuera inmolándose en un atentado suicida.
Esta secta, los ismaelitas, consiguió dejar hecha unos zorros los que ahora es Irán, eliminando al equivalente del Primer Ministro y del Rey. Aquí pueden obtener más información sobre este tema.
¿Cómo acabaron con esta secta? No fueron los persas los que lo hicieron. Tuvieron que ser los mongoles, que acabaron con la dinastía reinante, con los terroristas y con todo lo que se les oponía. Curioso final y curiosa la forma que tiene la Historia de pasar página.
Mientras tanto, habrá que acostumbrarse a que cualquiera que pase a nuestro lado desenfunde su arma (de fuego o arma blanca) y la use al instante contra cualquier enemigo de Dios, o sea, cualquier infiel. Con la bendición del predicador de la mezquita de su barrio, que también es nuestro barrio, por supuesto. Todo esto dicho con buen rollito y con mucha alianza de civilizaciones, por favor.
Ahora veía las noticias y comentaban que hay predicadores musulmanes que no solo ven con buenos ojos los ataques, sino que además los alientan diciendo que el Islam tiene un espacio para la violencia...
ResponderEliminarTriste que se piense de esa forma. Y muy duro pensar que a lo mejor tu vecino puede ser tu victimario...
Saludos Carolus
No creo que sea casualidad que en casi todas las guerras y atentados terroristas que hay en el mundo, haya musulmanes por el medio. Sin embargo, los budistas no dan tanto mal, debe ser una religión mas tranquila...
EliminarSaludos, Manuel
Para ellos me imagino que será su táctica lo más parecido entre nosotros los europeos a la guerra de guerrillas, al sabotaje y al asesinato selectivo como practicamos contra enemigos fuertes y poderosos como las tropas de Napoleón o los invasores nazis
ResponderEliminarEso sí. Nosotros sin hachís y sin huríes del paraíso.
Un saludo.
Algo así sucedió, Cayetano, en la Guerra de Independencia: nuestros curas y frailes eran los que mas enardecían al personal. Tanto, que muchos de ellos empuñaban el trabuco y morían en combate. Estoy esperando ver cómo se inmola un clérigo musulman en ataque suicida, para dar ejemplo a su huestes, por supuesto.
EliminarSaludos
Los clerigos han sido, y son todavía en muchos casos, los mayores vendedores de humo.... Especialmente los que predican en contra de su propia religión, que son muchos.
ResponderEliminarY ha sido así desde que el mundo es mundo. Hubo un listo en una tribu cavernícola que se inventó el puesto de hechicero... y milenios mas tarden aparecen la Meca, el Vaticano, etc.
EliminarSaludos, csc212