Internet no es mejor ni peor que el mundo físico. Internet solo amplifica nuestra visión del mundo.
Si un artículo (a ser posible, breve), foto o vídeo cae en gracia a las masas, se reproducirá por internet de forma viral. Según en qué red estemos, se llevará un “me gusta”, un “+1”, un “retweet” o se propagará por el WhatsApp tan rápido como el mismo pánico que ha creado el virus del ébola (y su gestión).
Pero lo que más me asombra de internet, es que si pones la foto de un niño que tiene una enfermedad muy puñetera con un texto de “haz clic en me gusta si estás en contra de (la enfermedad que sea)”, tienes asegurados cientos de “likes”. No digamos más si en vez de pedir “likes” pides “amén”, que es la versión cristiana del “me gusta”. Y si además ofreces que al día siguiente San Aberroncho te va a conceder un milagro, los “amenes” salen como setas en otoño (verídico y comprobado).
La magia de internet y las redes sociales. Rajoy te ama |
Haz la prueba, pon en tu Facebook una foto de tu presidente de gobierno con el texto de que te ama y verás cómo te contestan multitudes enfebrecidas. No digamos ya si la foto es de Jesus o de Diosito (Dios, para los amigos). Sin embargo, no he visto lo mismo en Mahoma o Alá, tal vez por su prohibición de presentar imágenes suyas.
Me he cansado de preguntar sobre la efectividad de estos “likes” y “amenes” y de sondear a ver si los milagros aparecen, pero solo recibo contestaciones tachándome de descreído, en el mejor de los casos. Otro fenómeno sorprendente con la misma efectividad de propagación es proponer “me gusta” o una oración para conseguir la paz mundial o cosas por un estilo. Digo yo, que si esto funcionara, desde hace milenios no habría guerras y no haría falta usar las redes sociales para darle una pequeña limpieza a nuestra mala conciencia. Me temo que pronto las penitencias sustituirán el rezo de penitencia por mil “likes” y “amenes” en Facebook. Tiempo al tiempo.
En fin, como dijo el torero, “hay gente para todo”. Dale un “me gusta” y comparte este artículo, y mañana verás cómo te ocurre un milagro (por ejemplo, que respirar aun siga siendo gratis). Sé de un caso que no dio un “me gusta” y fue violado repetidas veces por una cabra con sífilis. Amén.
Funciona mucho la imagen del niño enfermo o desaparecido que si no la compartes parece que has de sentirte la persona con menos sentimientos del mundo.
ResponderEliminarUn saludo.
Chantaje emocional, le llaman a este truco. Empieza a aburrir, me lo tomo a pitorreo
EliminarUn saludo