¡Sigue la regla de los 3 segundos en seducción! Aunque no sepas qué decirle a una chica, no te quedes callado. Actúa rápido y con confianza.
Actúa en con la regla de los 3 segundos, incluso si no tienes ni idea de cómo continuar. Si actúas en 3 segundos, ella verá la espontaneidad en tu enfoque y todo esto trabajará a tu favor. Sin embargo, si esperas, vacilas y luego decides lanzarte, te encontrarás en una situación mucho más débil.
Seducción con la regla de los 3 segundos para principiantes |
Cuando te muestras rápido y seguro en tu enfoque, demuestras una confianza en ti mismo que es inherentemente atractiva. Incluso si no tienes un plan claro sobre qué decir o hacer después, el hecho de dar el primer paso con determinación puede generar una impresión positiva en la otra persona. Esta espontaneidad inicial puede abrir la puerta a nuevas oportunidades y facilitar la fluidez de la conversación.
Por otro lado, si vacilas o esperas demasiado antes de decidirte a actuar, puedes encontrarte en una posición más débil. La duda y la indecisión pueden proyectar una imagen de falta de confianza y oportunidad perdida. Además, esperar demasiado puede hacer que la otra persona se sienta incómoda o desinteresada, lo que dificulta el establecimiento de una conexión genuina.
En resumen, seguir la regla de los 3 segundos puede ser una estrategia efectiva para establecer una impresión positiva y generar momentum en tus interacciones sociales. Aunque no tengas un plan definido sobre cómo continuar, actuar con prontitud y seguridad puede abrir nuevas oportunidades y aumentar tus posibilidades de éxito en la interacción.
En la regla de los 3 segundos, el tiempo es crucial para transmitir una impresión de seguridad y espontaneidad. Si te acercas a alguien dentro de este corto período, percibirá tu llegada como un cambio en un entorno estático, lo que sugiere espontaneidad. Del mismo modo, si accedes a ella dentro de los primeros 3 segundos de su llegada, demostrarás nuevamente esta cualidad, ya que no podrías haberlo hecho antes de su llegada.
Regla de los 3 segundos en seducción |
La importancia de la primera impresión radica en que establece el tono para la interacción posterior. Si esa primera impresión refleja confianza y espontaneidad, las posibilidades de generar sentimientos positivos en la otra persona son altas, lo que a su vez contribuye a una conversación más fluida y cómoda.
La regla de los 3 segundos, por supuesto, no es algo absoluto, ya que ella puede simplemente no haber notado tu presencia o podría haber estado ocupada con algo (o alguien). Los tres segundos comienzan a contar desde el momento en que la has visto y eres libre de abordarla. Pero cuando se cumplen estas dos condiciones, realmente no tienes tiempo suficiente para pensar. Lo peor de no utilizar la regla de los 3 segundos es que la chica te ve vacilar.
Al acercarte a las chicas, usa la regla de los 3 segundos y trata de escoger algo para tener una conversación. Podría ser un libro, algo que estéis usando, una pregunta sobre algo que ella pueda (no necesariamente) tener conocimiento, algo que tengáis en común, lo que sea.
"Uno debe de tomar sus decisiones en el lapso de siete respiraciones, un samurái es alguien que toma decisiones con presteza." Hagakure (descargar extracto)
Yo con tres segundo frente a una chica, me bloqueo :D ...Incluso antes :D
ResponderEliminarSaludos
Sin embargo, dudo que te ocurra frente a tus pacientes, incluso frente a la misma chica. Es curioso cómo cambia todo la situación en la que te encuentras.
EliminarSaludos
Si estás buenorro te sobran dos de los tres segundos.
ResponderEliminarUn saludo.
No estoy del todo de acuerdo. Una tía de buen ver, si es un pan sin sal, te acaba aburriendo. A las mujeres les pasa lo mismo con los hombres.
EliminarUn saludo.
Estoy de acuerdo; pero no creo que en tres segundos te dé tiempo a detectarlo. Hace falta convivencia para descubrir que esa persona que te llamó la atención en dos segundos es pesada o aburrida o sosa.
EliminarEsta regla se refiere a la regla de los 3 segundos para abrir una comversación con una chica, no para gustarle, eso biene en la segunda y tercera fase de la atracción.
Eliminar