¿Cuándo fue la última vez que pensaste cómo aumentar tu persuasión, cambiar los pensamientos, dar forma a las opiniones y mover a otros a la acción?
La capacidad de aumentar tu persuasión es una de las habilidades esenciales para los líderes en todos los niveles. Es más un arte que una ciencia y puede ser difícil de conseguir.
Pero la conclusión es que aumentar tu persuasión es vital. Y a medida continuamos a transformando (a una velocidad vertiginosa) el lugar de trabajo interconectado, interdependiente, cada vez más global, aumentar tu persuasión va a ser cada vez más importante.
Aumentar tu persuasión |
En las organizaciones jerárquicas tradicionales, el poder se basaba normalmente en la posición. Cuanto más alto se encuentra alguien en el organigrama, más poder ejerce. Hay reglas claras, de arriba hacia abajo, donde la persona en la parte superior es la que manda. La persona con el poder tiene la persuasión.
Hoy en día, las organizaciones se están moviendo hacia modelos más planos, matriciales y en equipo. La teoría es que con el cambio y la complejidad viene la necesidad de ser más ágil, incluir más diversidad de pensamiento y una mayor colaboración. En este modelo, el poder se basa más en la propia capacidad para persuadir y hacer las cosas fuera de las estructuras jerárquicas tradicionales. En otras palabras, la persona con persuasión tiene el poder.
Para ser un factor de persuasión efectivo, es necesario tanto el fondo y el estilo. Sin una base sólida de credibilidad, incluso los líderes más expertos no tendrán suficientes conocimientos. Por otro lado, las personas altamente creíbles pueden luchar con su persuasión si entienden la dinámica interpersonal en el juego.
Se han llevado a cabo investigaciones para identificar y medir los estilos de persuasión. Hay cinco categorías:
Afirmar: insistir en que tus ideas sean escuchadas y desafiar las ideas de los demás.
Persuadir, más que vencer, es convencer. Y las tácticas a emplear no solo varían según sean los interlocutores; sino también según sea el ámbito de aplicación: laboral, familiar, conyugal... En casa, como ya me conocen, no me hacen ni caso.
ResponderEliminarUn saludo, Carlos.
Para vencer, hay que discutir. Y discutir es lo contrario a persuadir. Lo malo es cuando conocen todos tus trucos, como en casa.
EliminarUn saludo, Cayetano
La auto-critica en estos casos es importante para identificar las debilidades (que probablemente pasamos de largo porque somos vanidosos). En la medida que tomemos fortalezas, mejoraremos nuestra capacidad negociadora... También con los pacientes...
ResponderEliminarSaludos
La autocrítica es muy difícil de hacer ya que nos engañamos o no queremos ver nuestro lado oscuro, pero siempre que se intenta hacer de forma sincera se obtiene algún resultado.
EliminarSaludos