Ir al contenido principal

Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

Einstein y el asombroso Dios de Spinoza

Descubre el Dios de Spinoza según Einstein: armonía universal, fascinación y panteísmo en la mente de un genio.

¿Quién era el Dios de Spinoza y por qué Einstein creía tanto en él? ¿Quién fue Spinoza y a qué Dios se refería? Spinoza, un filósofo holandés del siglo XVII, creía en que todo lo que rodea al hombre era Dios y que se manifestaba a través de la armonía de lo existente. ¿Por qué Einstein estaba tan vinculado a esta ideología religiosa?

Cuestiones que el hombre se ha preguntado desde que el hombre es hombre y que, aún a día de hoy, seguimos preguntándonos. Llevamos toda nuestra vida intentando encontrar las respuestas a todas estas preguntas, ya sea a través de la religión o la ciencia.

Einstein y el Dios de Spinoza
Einstein y el Dios de Spinoza
Por ello, lo que pensara una de las mentes más brillantes del s. XX y de la historia, el físico alemán Albert Einstein, siempre ha suscitado mucho interés entre aquellos que aún siguen buscando respuestas a estas preguntas. Pues bien, Einstein, según declaró en multitud de ocasiones, creía "en el Dios de Spinoza" pero, ¿quién fue Spinoza y a qué Dios se refería?

Baruch de Spinoza

Baruch de Spinoza fue un filósofo holandés, considerado uno de los grandes racionalistas de la filosofía del siglo XVII, junto con Descartes y Pascal, entre otros. Sus reflexiones supusieron una profunda crítica a la visión clásica y ortodoxa de la religión, algo que derivó en su excomunión y destierro, así como la prohibición y censura de sus escritos por parte de su comunidad.

Su visión del mundo y de la fe se aproximan en gran medida al panteísmo, es decir, la idea de que lo sagrado es toda la naturaleza en sí misma. Esto básicamente quiere decir que Todo es Dios.

Aunque el holandés fue repudiado por su forma de pensar, sus obras perduraron. Y no solo eso, sino que fueron abrazadas por mentalidades tan ilustres como la Albert Einstein. La postura y creencias religiosas del físico se aproximaban a la visión del Dios de Spinoza como algo que no nos dirige y castiga, sino que simplemente forma parte de todo y se manifiesta a través de este todo.

Las ideas de Einstein

En algunas entrevistas a lo largo de su vida, Einstein manifestaría cierta dificultad para explicar sus creencias. De hecho, en una ocasión, cuando fue interrogado por el rabino Herbert S. Goldstein, sobre si creía en la existencia de Dios, este le contestó:

"Creo en el Dios de Spinoza, quien se revela así mismo en una armonía de lo existente, no en un Dios que se interesa por el destino y las acciones de los seres humanos".

Si bien no compartía la idea de un Dios personal, manifestó que consideraba que la mente humana no era capaz de comprender la totalidad del universo, ni cómo se organiza, a pesar de ser capaz de percibir la existencia de cierto orden y armonía.

En 1930, durante una entrevista publicada en el libro Glimpses of the Great de G. S. Viereck, el Premio Nobel se explayó aún más sobre este tema:

"Tu pregunta es la más difícil del mundo. No es algo que pueda responder con un simple sí o no. No soy ateo. No sé si puedo definirme como un panteísta. El problema en cuestión es demasiado vasto para nuestras mentes limitadas. ¿Puedo contestar con una parábola? La mente humana, no importa que tan entrenada esté, no puede abarcar el universo. Estamos en la posición del niño pequeño que entra a una inmensa biblioteca con cientos de libros de diferentes lenguas. El niño sabe que alguien debe de haber escrito esos libros. No sabe cómo o quién. No entiende los idiomas en los que esos libros fueron escritos. El niño percibe un plan definido en el arreglo de los libros, un orden misterioso, el cual no comprende, solo sospecha. Esa, me parece, es la actitud de la mente humana, incluso la más grande y culta, en torno a Dios. Vemos un universo maravillosamente arreglado que obedece ciertas leyes, pero apenas entendemos esas leyes".

"Nuestras mentes limitadas no pueden aprender la fuerza misteriosa que mueve a las constelaciones. Me fascina el panteísmo de Spinoza porque él es el primer filósofo que trata al alma y al cuerpo como si fueran uno mismo, no dos cosas separadas".

A pesar de ser una de las mentes científicas más brillantes, Einstein veía que ciencia y religión no se encuentran necesariamente enfrentadas, puesto que ambas persiguen el mismo fin: la búsqueda y entendimiento de la realidad.

Y tú, ¿qué opinas?

Te invito cordialmente a compartir esto con todos tus amigos. Tu apoyo significa mucho. ¡Gracias de antemano!

Comentarios

  1. Un poco de luz en la oscuridad, se comparta o no.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hacen falta muchos destellos como estos.

      Saludos

      Eliminar
  2. Yo también sigo al Dios de Spinoza... No es falible aunque. Si demostrable...y posiblemente se convierte en normal

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es un Dios mas creíble y mas humano, mas cercano a nuestro corazón.

      Eliminar
  3. Un dia estava platicando de Dios con un niño de 6 años y le dije que dios era el creador de todo y me contesto quiere decir que estamos dentro de dios? Y tuve que desirle que si,me iso comprender una realidad.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La pregunta del barbero

Un hombre llamado Juan asomó la cabeza en la barbería de Paco y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar para un corte de pelo?" Paco, mirando la tienda llena de clientes, respondió: "Unas dos horas." Juan se marchó. Unos días después, Juan volvió a asomarse y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar hoy para un corte de pelo?" Paco, observando la tienda, dijo: "Unas tres horas." Juan se fue nuevamente. Una semana más tarde, Juan regresó y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar hoy para un corte de pelo?" Paco, revisando la tienda, respondió: "Unas hora y media." Juan se marchó una vez más. Paco, intrigado, se volvió hacia su amigo Luis y le dijo: "Oye, Luis, hazme un favor. Sigue a Juan y mira a dónde va. Siempre pregunta cuánto tiempo tiene que esperar, pero nunca regresa."  Ver Las 20 leyes de la astucia Un rato después, Luis regresó a la barbería, riéndose a carcajadas. Paco, curioso, preguntó: "¿...

El profesor y la alumna en privado

El profesor Johnson se encontraba absorto en sus papeles cuando unos suaves golpes en la puerta lo sacaron de su concentración. "Adelante", dijo sin levantar la vista. La puerta se abrió y se cerró rápidamente. El sonido de tacones sobre el suelo de madera lo hizo alzar la mirada. Allí estaba Emily, una de sus estudiantes más problemáticas, acercándose a su escritorio con una mirada que lo puso inmediatamente en alerta. Emily se inclinó sobre el escritorio, su blusa entreabierta revelando más de lo apropiado. El profesor Johnson contuvo la respiración, incómodo ante la situación.  "Puedo hacer lo que quieras", susurró Emily con voz temblorosa, "pero por favor... cambia mi última calificación. Lo necesito, o la administración me expulsará".  Ver Las 20 leyes de la astucia El corazón del profesor Johnson se aceleró, no por deseo, sino por compasión y preocupación. En los ojos de Emily vio desesperación, no seducción. Con calma, se levantó y abrió la puerta. ...

Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

El motivador cuento de la hormiga y la miel

El motivador cuento de la hormiga y la miel cautiva con su poderosa enseñanza: la moderación da paz, el exceso consume. Una gota de miel cayó al suelo. Una hormiguita, atraída por su dulzura, se acercó y la probó.  La miel era tan deliciosa que no pudo resistir la tentación de volver. Tomó otro sorbo, luego otro, cada vez más hechizada por este néctar divino . Pero pronto, la hormiga, insaciable, quería más. Decidió sumergirse por completo en la gota de miel, bañarse en ella, perderse en ella. Se sumergió, se envolvió, se ahogó. ¡Ay! La miel, tan dulce, se convirtió en su prisión. Sus patitas, pegajosas, ya no podían moverse. Luchó, luchó, pero en vano. La miel, lentamente, la rodeó, la inmovilizó, la asfixió. Y la hormiga, prisionera de su propia gula, pereció en esta dulzura mortal. Los Sabios dicen: "El mundo es solo una enorme gota de miel". El que se contenta con probarlo con moderación encuentra la paz. Pero el que se sumerge en ella, codicioso e insaciable, es tragad...

El médico chino

Un médico chino no puede encontrar trabajo en un hospital en EE. UU., así que abre su propia clínica. Pone un letrero afuera que dice: "TRATAMIENTO POR $20 - SI NO SE CURA, RECUPERE $100. " Un abogado estadounidense piensa que esta es una gran oportunidad para ganar $100 y va a la clínica. Abogado: "He perdido mi sentido del gusto." Médico chino: "Enfermera, traiga la medicina de la caja Nº 14 y ponga 3 gotas en la boca del paciente." Abogado: "¡Puaj! Esto es queroseno." Médico chino: "Felicidades, su sentido del gusto está restaurado. Deme mis $20." El abogado, molesto, regresa unos días después para intentar recuperar su dinero. Abogado: "He perdido la memoria. No puedo recordar nada." Médico chino: "Enfermera, traiga la medicina de la caja Nº 14 y ponga 3 gotas en su boca." Abogado (molesto): "Esto es queroseno. Me diste esto la última vez para restaurar mi gusto." Médico chino: "Felicidades. Ha rec...