La historia de Mia Khalifa es un testimonio de las prácticas comerciales depredadoras de la industria del porno
Es un nombre muy conocido en el mundo de la pornografía. Pero lo que es menos conocido es cómo Mia Khalifa entró en la industria y cómo las empresas pornográficas siguen lucrándose con imágenes suyas en contra de su consentimiento.
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A finales de 2014, con solo 21 años, había protagonizado una docena de películas explícitas para adultos, había ganado 12.000 dólares en total antes de salir de la industria y, a día de hoy, sigue siendo una de las intérpretes "más vistas" del mundo.
El problema es que ella nunca quiso ese título. Mia explicó que su corta carrera en el porno fue un "acto impulsivo de rebeldía", pero después de que uno de sus vídeos se hiciera viral, se dio cuenta de la realidad de su decisión: lo que se comparte online, especialmente en un sitio tube como Pornhub vive para siempre.
Considera que una de las intérpretes porno más solicitadas de todos los tiempos, Mia Khalifa, es una mujer que sólo trabajó en la industria durante tres meses, pero que aún hoy es famosa debido a un vídeo abiertamente racista que se vio obligada a ver para poder actuar. ¿Qué dice eso de nuestra cultura en su conjunto?
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Interesante y contribuye al conocimiento y veraz de la nueva sociedad.
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