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Racismo extremo

El último aborigen de Tasmania, William Lanne, murió en 1869. Cierto médico llamado William Crowther pidió permiso para examinar y diseccionar el cuerpo, lo que no se le concedió. 

Así que Crowther simplemente irrumpió en el hospital y comenzó a cortarse de todos modos. No sufrió ninguna repercusión por esto, ya que Lanne era considerado "apenas humano" por la mayoría de los habitantes.

Ver Esclavistas que embarazaban a sus esclavas

Racismo extremo

El Dr. Crowther le cortó las manos y los pies a Lanne. Extrajo sus huesos y lo hizo de una manera brutal. Le cortó los genitales, que declaró "como los de un animal": es famoso por convertir el escroto de Lanne en una billetera o una bolsa de tabaco. Luego le extirpó el cerebro... y dijo que "se parecía notablemente al cerebro de un hombre blanco", lo que lo sorprendió. Crowther ha desarrollado una teoría sobre esto... "Los cerebros de las razas inferiores, cuando se elevan entre las razas superiores, se transforman para parecerse a los suyos". Lanne se había criado en un orfanato junto a niños blancos, por lo que Crowther dijo que no pudo encontrar "anomalías en el cerebro" como esperaba.

Racismo extremo

Hay una escena en Django desencadenado en la que el personaje de DiCaprio, un dueño de esclavos racista, rompe una calavera para mostrar su forma "servil". Es un gran escenario y es entretenido. Lo que es extraño es lo preciso que es en relación con las actitudes del siglo XIX hacia la raza: los cerebros, los cuerpos y la piel de "otras" razas eran de hecho solo una curiosidad para científicos y médicos.

Años más tarde, el compañero de William Lanne, Truganini, también murió. Suplicó ser enterrada, traumatizada por lo que le había sucedido a su ex pareja. Y, al principio, fue enterrado. Solo para ser desenterrada de nuevo, examinada y su cuerpo expuesto en público hasta la década de 1940. Los científicos racistas del siglo XIX fueron realmente los peores.

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