Giro genial: sátira de un cura y un viajero. Un diálogo inesperado que desenmascara prejuicios.
Un hombre se sube a
un avión y se sienta al lado de un cura.
Saca de una bolsa una botella y da un largo trago, tras lo cual se pone a leer un viejo periódico que llevaba en el bolsillo.
El cura le ignora
disimulando su incomodidad. Al rato, el hombre le pregunta:
-Oiga padre, ¿puede
decirme que es lo que causa la artritis?
El cura, molesto, le
responde sarcásticamente:
-Ciertamente la vida
profana, el andar frecuentando mujeres mundanas, los excesos con el tabaco y el
alcohol; esas borracheras que terminan en pleitos y muchas más de esas basuras
y porquerías.
-¡Pues vaya
mierdaaaa!, responde el hombre dando otro trago de la botella y volviendo a la
lectura.
Un momento después,
el cura pensando en que su respuesta no fue digna de un sacerdote decide
disculparse y le pregunta en tono comprensivo:
-Disculpe usted, no
quise ser tan rudo hijo mío...
-¿Desde cuándo sufre
de artritis?
-¿Yoooo? No joda
padre. A mí no me pasa nada.
Sólo estaba leyendo
un artículo del periódico que dice que el Papa sufre de artritis desde hace
varios años .
El cura rápidamente
cambia y le dice:
- Hijo, el Papa no
tiene artritis, no creas lo que publican los periódicos, y te recomiendo rezar
un rosario por haber pensado mal de un hombre santo.
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