Una rubia empieza a sospechar que su novio le está siendo infiel, así que decide tomar cartas en el asunto y compra una pistola. Ese mismo día, llena de determinación, va al apartamento de su novio. Al abrir la puerta, lo encuentra exactamente como temía: ¡en brazos de una pelirroja! Con la furia a flor de piel, la rubia saca la pistola y apunta directamente a su novio. Lo mira fijamente con ojos llenos de lágrimas, pero, de repente, se siente abrumada por el dolor. Sin pensarlo dos veces, se pone la pistola en la sien. Su novio, horrorizado, grita: —¡Cariño, no lo hagas! ¡Por favor! La rubia lo mira con rabia y le responde: —¡Cállate! ¡Tú eres el siguiente! Y tú, ¿qué opinas? Te invito cordialmente a compartir esto con todos tus amigos. Tu apoyo significa mucho. ¡Gracias de antemano!