Trepas, pelotas, escaqueados y caraduras son los más indeseables de la oficina. Convivir con ellos es algo sencillo hasta que se convierten en enemigos Pasamos buena parte de nuestra vida en la oficina, rodeados de personas de toda índole, clase y condición a las que apenas conocemos. Las relaciones laborales son eso, laborales y conviene no confundirlas con las personales. En momentos tan duros como los que vivimos, en los que los despidos, las bajadas de sueldo y las promociones inexplicables están a la orden del día, mantener el puesto de trabajo despierta el instinto de supervivencia profesional. Cómo trabajar con tu enemigo ¿Qué actitudes convierten a tu mejor colega en un enemigo? Eva Rimbau, profesora de la UOC y experta en dirección de recursos humanos, tiene la respuesta: “Es especialmente peligroso el compañero que parece simpático y comprensivo, que te invita a contarle tus problemas y que luego utiliza esta información en tu contra”. Pero lo peligroso vie