Cuando un individuo se comporta de manera superior, se debe a un sentimiento subyacente. Esta persona cree que es superior porque piensa que la otra es una amenaza.
Está claro que le falta confianza en sí misma y autoestima. Desde cierto ángulo, considera que los demás descubrirán que no es tan fuerte como dice.
Entonces se comporta de una manera que la hace sentir mejor que los demás. Este rasgo de carácter no difiere realmente del complejo de inferioridad.
Este trastorno de la personalidad puede desarrollarse entre los 5 y los 12 años. En esta etapa de desarrollo, el niño busca aceptación y validación.
Sigue leyendo el artículo para descubrir los 10 signos que demuestran que sufres complejo de superioridad.
¿Qué es el complejo de superioridad?
Un complejo de superioridad es un término de mecanismo de defensa psicológica acuñado por Alfred Adler. Su desarrollo en forma menor es de alguna manera inevitable en algún momento de la vida.
Utilizamos este tipo de complejos de vez en cuando para hacer frente a determinadas situaciones.
Pero hay gente que puede sufrirlo de forma crónica y no tener ni idea. Paradójicamente, los complejos de superioridad nacen de inseguridades muy arraigadas.
Según los expertos, esta actitud pretenciosa y el sentimiento de inferioridad son solo dos manifestaciones diferentes de los mismos problemas de autoestima.
Los complejos de superioridad crean una variedad de problemas de comportamiento y pueden dificultar la conexión plena con los demás.
1. Hay problemas de ansiedad
Las personas con complejo de superioridad a menudo desarrollan problemas de ansiedad debido a varias cosas, como la sobrecompensación. Hay un conflicto entre su verdadero yo y la imagen proyectada.
Siempre es difícil para ellos hacer frente a estas dos personalidades, pero las sesiones de desarrollo personal pueden ayudarles mucho.
Tener un complejo de superioridad no siempre convierte a alguien en una mala persona. Es posible superar estos sentimientos, este complejo de inferioridad subyacente.
Solo tienen que estar dispuestos a reflexionar sobre si mismos y hacer cambios positivos. Entonces, ¿cómo pueden superar esto?
Tienen que tratar de identificar y adoptar al menos una fortaleza en todas las personas con las que tratan.
Cada persona es diferente, es al permitir que los demás se defiendan por sí mismos cuando aprenden y crecen.
Antes de criticar, tienen que desarrollar preguntas que puedan ayudar a la persona a reconocer sus errores por sí misma. Recuerda cómo haces sentir a las personas que te rodean.
¿Es bienestar? Si solo hay criticas, siempre le llamarán malo y esos comentarios serán descartados como negativos.
2. Nunca se equivocan
¿Siempre quieren demostrar que los demás están equivocados? Pero ¿por qué se sienten así?
En pocas palabras, no están realmente felices con quien son como personas.
En lugar de lidiar con estos sentimientos, en esencia, están eligiendo mostrar una versión perfecta de ellos mismos.
Las personas que padecen este complejo no pueden deshacerse de la imagen de sí mismos que intentan crear para los demás.
Una persona acomplejada siempre encuentra la forma de generar una compensación a su sentimiento de inferioridad.
Estas personas no saben que aceptar rasgos de personalidad negativos significa aceptar sus imperfecciones.
Desafortunadamente, cuando una persona sufre de un complejo de superioridad, admitir sus errores solo arruinaría esta versión falsa de sí misma en la que confía.
3. Siguen siendo el centro del mundo
Detectar quién todavía siente que tiene todos los derechos es difícil en los adultos.
Esta incapacidad para usar la inteligencia emocional y tener una vida social equilibrada proviene de una infancia complicada.
Por ejemplo, una abuela puede darle a su nieto todas las cosas materiales que quiere, pero no la educación emocional y mental que necesita.
Como resultado, el niño crecerá y se sentirá con derecho a obtener todo lo que quiera. No se le enseñó la moral y las normas, pero aún así, se le dio todo.
¿Ves adónde puede llevar este tipo de educación a los niños? Tienen una falta de responsabilidad y una dependencia emocional bastante flagrante.
4. Son extremadamente controladores
Buscan a menudo liderazgo en el trabajo o en grupos. Es difícil para ellos el dejar ir y les gusta afirmar su dominio
En una posición de poder, actúan de tal manera que los demás les temen en lugar de respetarles.
Perder esa condición de líder les puede causar grandes estragos en su vida.
También tienen una falta de sentido de comunidad. Si pierden el control, sienten que has perdido tu superioridad.
De hecho, según ellos, su nivel de importancia depende de su capacidad de autocontrol.
Pero este no es el caso, al ser extremadamente controlador simplemente demuestran que tienen complejo de superioridad.
5. Condescendencia
Un grado poco saludable de superioridad puede ser la razón por la que hablan o actúan con condescendencia.
Creen que son más inteligente durante las conversaciones y crean definiciones de palabras que otros encuentran demasiado complicadas.
El complejo de superioridad está muy acentuado cuando un individuo es condescendiente.
Este tipo de personas a menudo hacen chismes sobre otras personas que consideran inferiores o se niegan a asociarse con ciertas personas. A veces son las personas de bajos ingresos a las que evitan.
Según ellos, esta condescendencia los beneficia de muchas maneras. En las redes sociales, a menudo nos encontramos con este tipo de personas, especialmente durante el covid-19.
6. Usan mucho “yo” y “mi”
Cuando alguien sufre de un complejo de superioridad, piensan en términos de... si mismo.
Cuando se trata de discutir eventos, situaciones o relaciones, son egocéntricos.
Estas personas, a veces consideradas como pervertidos narcisistas, siempre intentarán hacerlo mejor que los demás.
Cuando se enteran de los logros de alguien, intentarán hacerlo mejor y se pondrán en el centro de atención.
Si ves a alguien así, recuerda que en realidad no es un problema de salud mental, es más común de lo que pensamos.
7. Se comparan constantemente con los demás.
Debido a que la autoestima se basa en los demás, una persona con complejo de superioridad no puede resistirse a compararse con quienes la rodean.
Se siente derrotada por los logros de otras personas porque, para ella, significa que no es buena en eso o que falta algo en su vida privada.
En la superficie, dejarán de lado los logros de los demás para distraerse de su propia falta de autoestima.
Este tipo de personas no se dan cuenta de que hay suficiente éxito para todos y que el sentimiento de superioridad no les llevará a ninguna parte. En resumen, ser feliz por los demás es tan bueno para uno mismo como para ellos.
8. Desafían a la autoridad
A menudo, aquellos que sufren de problemas complejos de superioridad desafían la autoridad. De hecho, creen que están por encima de la ley y que pueden hacer lo que quieran.
Algunos de ellos piensan que nunca serán atrapados haciendo cosas malas. También son discretos en sus amistades, familia y relaciones.
Todas las leyes y construcciones sociales no tienen nada que ver con ellos. Algunos incluso piensan que podrían ser inmortales.
Es un poco exagerado, pero te sorprendería hasta dónde llegará su superioridad.
9. Su estado de ánimo cambia rápida y frecuentemente
Los que tienen un complejo de superioridad, probablemente sufren una lucha constante entre la inferioridad interna y la necesidad de parecer dominante en el exterior.
No es de extrañar, entonces, que estos sentimientos puedan chocar y causar cambios de humor drásticos. A menudo no reconocen este problema de autoestima en ellos mismos.
Es difícil para ellos el comprender sus emociones y por lo tanto no pueden controlarlas.
Esto puede tener efectos desafortunados en su salud mental mientras luchan por conectarse con su verdadera identidad.
10. Les falta empatía
Las personas con complejo de superioridad suelen tener dificultades para tener compasión por los demás.
Están consumidos por sus propias inseguridades y están demasiado ocupados trabajando en su autopercepción para tratar de comprender a los demás.
Su falta de empatía los hace parecer fríos y calculadores, o como si estuvieran demasiado preocupados por sus propios intereses.
A pesar de todos los aspectos negativos, tener un complejo de superioridad no les convierte en unas personas horribles.
Es solo parte de un dolor emocional complicado y una sensación de insuficiencia.
Y, para algunos, la terapia puede ayudar a superar estos sentimientos y recuperar el sentido de autoestima.
Complejo de superioridad: cambiar las cosas
Si bien superar este complejo de superioridad no es fácil, es posible.
Como dije antes, esto suele ser un acto de equilibrio. Cuando sienta alguna de estas características con usted, deténgase y pregunte por qué.
En cuanto a los que conoce, puede decirles lo que están haciendo y ofrecerles ayuda y apoyo.
Entonces depende de ellos decidir hacer ese cambio.
Tómese un tiempo y comprenda estos puntos para que usted, sus amigos y familiares puedan beneficiarse de ellos e incluso ayudar a otros también.
Algunos trucos para controlar el complejo de superioridad
El complejo de superioridad puede interferir en la vida de la persona haciendo que sus amigos se alejen de él, pero nunca reconocerán que su actitud es la causa. Algunos consejos que pueden ayudar a controlar los sentimientos de superioridad son:
No enfatizar demasiado la imagen: a la mayoría de las personas les gusta sentirse amadas, admiradas o apreciadas, pero lo que más importa es cómo nos sentimos con nosotros mismos. Incluso si aceptan cumplidos, no deben dejar que aumente su autoestima en exceso.
Estar abierto a escuchar: es muy importante darse cuenta de que una opinión es solo eso y que hay diferentes puntos de vista, que deben ser aceptados. Cada persona tiene derecho a tener su propia opinión. Es fundamental dejar que los demás expresen sus opiniones sin minimizarlas, porque son diferentes a las suyas.
Aceptar el hecho de que cada uno de nosotros tiene fortalezas y debilidades: todos tenemos muy buenas cualidades y podemos estar orgullosos de ellas, pero no debemos olvidar que no somos los únicos, hay más personas con buenas cualidades. Además, debemos aceptar que todos también tenemos puntos débiles, esto es algo normal y que la humildad es fundamental.
Muchos compañeros, tienen este problema... Se encumbran en sus mediocridades y...
ResponderEliminarSaludos Carlos
Abunda demasiado este problema. Para ver cómo es Juanillo, dale un carguillo...
EliminarSaludos, Manuel.
Sentirse superior, los aleja de las amistades.
ResponderEliminarEn el pecado tienen la penitencia.
EliminarSaludos
(pessoas) irracionais são sempre superiores aos outros, pelo menos assim se julgam mas na verdade são seres com baixa moral e sem principios.
ResponderEliminarPara mim um médico um engenheiro, um juiz, etc. Sao Pessoas importantes, mas o lixeiro, o trolha, o cavador, o sapateiro, etc. Tem o mesmo valor, não passamos sem uns e outros.
A diferença é que aqueles que se acham superiores, não fazem o que faz qualquer um os dos "inferiores" mas educados e humildes.
Muito obrigado pelo seu comentário.
EliminarSaudações