Un ratón, observaba a un granjero y a su esposa abriendo un paquete. Sintió curiosidad por lo que podría contener. Pero… ¡Quedó aterrorizado cuando descubrió que era una trampa para cazar ratones! Fue corriendo al patio de la granja a advertir a todos: ¡Hay una ratonera en la casa, una ratonera en la casa! La gallina, que estaba cacareando, levantó la cabeza y dijo: discúlpeme Sr. Ratón…Yo entiendo que es un gran problema para usted, pero a mí no me perjudica en nada, no me preocupa. El ratón se acercó al cordero: ¡Hay una ratonera en la casa, una ratonera! El problema de la trampa de ratones El cordero respondió: discúlpeme Sr. Ratón, no hay nada que yo pueda hacer, solamente pedir por usted. Quédese tranquilo, será recordado en mis oraciones. El ratón se dirigió entonces a la vaca, pero esta le contestó: ¿Acaso estoy en peligro? Estoy segura que no. Entonces el ratón volvió a casa, preocupado y abatido. Aquella noche se oyó un gran escándalo, mucho movimien