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Mostrando las entradas etiquetadas como serpiente

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No duermas con una serpiente pitón

Una mujer que dormía cada noche con su serpiente terminó siendo devorada por su "amiga" pitón. El veterinario ya le había advertido que esto podría ocurrir. Esta historia fue compartida en Facebook por Chris Planer. Aunque la veracidad de los hechos es discutible, es posible que algo similar haya sucedido, ya que muchas personas tienen serpientes como mascotas, y todas conservan sus instintos salvajes. Ver  5 datos increíbles sobre las serpientes que debes saber La mujer, profundamente encariñada con su mascota, una serpiente pitón, afirmaba tener un vínculo afectivo especial con el animal. La pitón dormía con ella cada noche, enroscándose sobre su cuerpo como si la estuviera protegiendo. Pero, ¿realmente era protección? Un día, la serpiente comenzó a actuar de manera extraña y dejó de aceptar la comida que su dueña le ofrecía. Preocupada por su fiel compañera, la mujer decidió llevarla al veterinario. Después de un examen minucioso, el veterinario llegó a una conclusión sorp

Un experimento loco

Karl P. Schmidt, reconocido herpetólogo estadounidense, optó por dedicar sus últimos momentos a la ciencia ante la muerte, demostrando una notable dedicación a su trabajo. En septiembre de 1957, el zoológico de Lincoln Park llevó una serpiente de 30 pulgadas al Museo de Historia Natural de Chicago, buscando ayuda para su identificación. Schmidt, que era muy respetado en el campo de la herpetología y tenía varias especies con su nombre, accedió a examinar la serpiente. El 25 de septiembre, Schmidt observó que la serpiente era africana, con patrones brillantes y una forma de cabeza similar a una boomslang, una serpiente venenosa del África subsahariana. Sin embargo, no estaba seguro de si se trataba de un boomslang porque la "placa anal de la serpiente no estaba dividida", una característica inconsistente con esa especie. Mientras examinaba a la serpiente, Schmidt tomó una decisión fatídica. Lo recogió para verlo más de cerca, pero la serpiente lo mordió repentinamente en el pu

La serpiente y el ratón

Se dice que un bosque estuvo expuesto a un gran incendio, por lo que los animales huyeron afuera de él. Entre esos animales había una serpiente tratando de arrastrarse lo más rápido que podía, tal vez sobreviviría al fuego. Ver  Una serpiente logra una venta difícil Al salir del bosque exhausto y sediento, miró y encontró un ratón. En ese momento, el ratón temió por sí mismo, por lo que quiso escapar, entonces ella lo llamó y le dijo: “No huyas, ratón, porque ya he escapado, y no te mataré después de este miedo que vi. " El ratón se detuvo y le dijo: “No entiendo”. Ella le dijo: “Tengo sed y quiero ser tu amigo de ahora en adelante. Solo dame agua”. El ratón le dijo que le siguiera. El ratón caminaba, y detrás de él se arrastraba la serpiente, cansada y sedienta... hasta que llegaron a una casa que él había preparado y trabajado durante mucho tiempo, así que entró y salió con un poco de agua para darle de beber. La serpiente bebió hasta saciarse. Entonces le dijo: Quiero dormir. ¿

Lo que enseñaba el ermitaño

Se cuenta lo siguiente de un viejo anacoreta o ermitaño, es decir, una de esas personas que por amor a Dios se refugian en la soledad del desierto, del bosque o de las montañas para solamente dedicarse a la oración y a la penitencia. Se quejaba muchas veces que tenía demasiado que hacer. La gente preguntó cómo era eso de que en la soledad estuviera con tanto trabajo. Lo que enseñaba el ermitaño Les contestó: “Tengo que domar a dos halcones, entrenar a dos águilas, mantener quietos a dos conejos, vigilar una serpiente, cargar un asno y someter a un león”. No vemos ningún animal cerca de la cueva donde vives. ¿Dónde están todos estos animales? Entonces el ermitaño dio una explicación que todos comprendieron. Porque estos animales los tienen todos los hombres, ustedes también. Los dos halcones, se lanzan sobre todo lo que se les presenta, bueno y malo. Tengo que domarlos para que sólo se lanzan sobre una presa buena, son mis ojos. Las dos águilas con

La luciérnaga y la serpiente

Cuenta la leyenda que una vez una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga.  La luciérnaga huía rápido con miedo de la feroz depredadora y la serpiente al mismo tiempo no desistía. La luciérnaga y la serpiente Huyo un día, dos días y la seguí… al tercer día ya sin fuerzas, la luciérnaga paro y le dijo a la serpiente: -¿Puedo hacerte tres preguntas? -No acostumbro dar este precedente a nadie pero como te a devorar, puedes preguntar, contesto la serpiente!! -¿Pertenezco a tu cadena alimenticia? -No, contesto la serpiente. -¿Yo te hice algún mal? -No, volvió a responder la serpiente. -Entonces, ¿Por qué quieres acabar conmigo? -¡Porque no soporto verte brillar! MORALEJA Muchos de nosotros nos hemos visto envueltos en situaciones donde nos preguntamos: ¿Por qué me pasa esto si yo no he hecho nada malo, ni daño a nadie? Sencillo de responder: ¡porque no soportan verte brillar! Cuando esto pase no dejes de brillar, continua siendo tu mismo, continua y si

La cobra y el gato (y un ratón)

Erase una vez un gato que cansado de no poder alcanzar al ratón, al ser este más rápido y más listo, decidió ir a ver a una cobra que vivía en el jardín de la casa. Con la zalamería que solo un gato puede tener comenzó a hablar con la cobra: -¿Sabes gran serpiente? Hay un ratón que presume de ser más rápido y más listo que tú –decía ronroneando. La cobra y el gato (y un ratón) -¿Y? – Contestó la serpiente con cierto interés. -Dice que cualquier día aprovechando que te haces vieja te matará y se quedará con tu territorio – dijo regocijándose el gato al haber captado el interés de la cobra –y es muy fuerte ese roedor, si tiene una oportunidad... -¿Y dónde se esconde ese ratón? – preguntó la serpiente totalmente levantada. -Junto al agujero que hay al lado del reloj de pie – contestó el gato sin poder esconder su satisfacción. Al día siguiente la cobra esperó detrás del reloj a su victima. No pasaron más de 5 segundos desde que el ratón asomase la cabe

El serpentario y la serpiente

El serpentario y la serpiente Un serpentario encontró a una serpiente; se abalanzó sobre ella y la hirió a picotazos.  - ¡No me pegues! – le dijo la serpiente –, todo el mundo dice que eres un pájaro venenoso; esa es una mala reputación, y se debe a que te alimentas de serpientes. Si dejas de comernos, ya no tendrás nuestro veneno, y dejarás de tener mala fama.  - ¡Me das risa! – contestó el pájaro –, ¡ustedes, las serpientes, matan a los hombres mordiéndolos! Decir que yo corro peligro con los hombres, sería una mentira. Yo me las como a ustedes para castigarlas por sus crímenes.  El serpentario y la serpiente Los hombres lo saben muy bien; ellos me alimentan para que yo los defienda contra ustedes. El hombre también sabe que mi carne y mis plumas están contaminadas y las usa para envenenar a sus semejantes; pero eso no es de mi incumbencia. Si el hombre mata con un arma, ¿es al arma o al hombre a quien hay que censurar? Yo no le deseo ningún mal al género humano