La cuestión de quién fue realmente responsable de la muerte de Jesús es compleja y ha sido objeto de mucho debate a lo largo de la historia. Según los relatos bíblicos y las interpretaciones históricas, la responsabilidad parece recaer en varios grupos e individuos , cada uno jugando un papel en los eventos que llevaron a la crucifixión. Por un lado, los líderes religiosos judíos , especialmente los principales sacerdotes y miembros del Sanedrín, son señalados como instigadores clave. Según los evangelios, estos líderes se sentían amenazados por las enseñanzas de Jesús y su creciente popularidad, lo que los llevó a conspirar para arrestarlo y presionar a las autoridades romanas para su ejecución. Sin embargo, la responsabilidad final de la sentencia y ejecución recae en las autoridades romanas , particularmente en Poncio Pilato, el gobernador de Judea en ese momento. Aunque los evangelios lo presentan como reacio a condenar a Jesús, al final cedió ante la presión popular y ordenó la