Un manual imprescindible para entender el poder desde Maquiavelo hasta el siglo XXI Si alguna vez te has preguntado cómo funciona realmente el poder, este libro es para ti. Maquiavelo y sus excelentes discípulos es la radiografía lúcida y sin filtros que necesitas para dejar atrás la ingenuidad. No es solo un recorrido histórico; es un manual estratégico que te enseña a reconocer, entender y navegar las complejidades de la manipulación, desde el Renacimiento hasta la era de los algoritmos y el populismo del siglo XXI. ¿Por qué este libro es crucial para ti? Este no es un texto académico aburrido, sino una narrativa envolvente que disecciona la estrategia detrás de los movimientos de los líderes más influyentes de la historia, desde Maquiavelo y César Borgia hasta Napoleón, Bismarck y Kissinger. Comprenderás la verdad incómoda: Te ofrece una comprensión mucho más clara del mundo en que vivimos, mostrándote que el maquiavelismo sigue vivo, oculto detrás de discursos emoc...
¿Conoces a alguien molesto? ¿Alguna vez sientes ganas de gritarle? Aquí puedes leer una pequeña guía para ayudarte la próxima vez que esa persona te vuelva a molestar.
1/ Practica en el espejo como si hablaras con esa persona. Prueba diferentes formas de contarle que te resultan molesto sin que suene demasiado duro. Trabaja tus expresiones faciales para que no se te vea demasiado malo.
2/ Habla con un amigo suyo, tal vez podría controlarse sin llegar a hablar con él.
3/ Dile de forma clara cuando empieza a molestarte. No le grites o le digas cualquier cosa que luego podrías lamentar, limítate a explicarle que su comportamiento es a veces muy molesto. La primera vez que se lo digas, se amable y dile que esperas que os entendáis y que deje de ser pesado.
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| Como tratar con alguien molesto |
4/ Si aún no se calla, dile algo mas como: "¿podrías dejar de hablar eso que me molesta?" Díselo amablemente, pero con firmeza.
5/ Queda de acuerdo con un amigo tuyo que sepa de tu situación. Si la persona comienza a molestarte con su verborrea, dile a tu amigo o hazle una señal, como guiñar un ojo para que tu amigo use una excusa para que ambos os alejéis de la persona molesta. No hagas lo que realmente es obvio: que estás tratando de alejarte de esa persona.
6/ Si todo lo anteriormente citado no funciona, trata de evitar a esa persona por donde sueles verlo. Evita hablarle y tal vez se dará cuenta de que no quieres hablar con esta persona y probablemente se pare.
7/ Trata de no...
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El problema es que los que son latosos y plastas no suelen ser muy inteligentes pero sí muy susceptibles y a veces lo mejor es cortar por lo sano, eso sí, educadamente.
ResponderEliminarUn saludo.
Totalmente de acuerdo, Cayetanio. Un plasta, por definición, siempre repetirá. Y eso es lo que se evita cortando para siempre... si es que se puede
EliminarSaludos