Ir al contenido principal

Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

Ésta es la parte más difícil del éxito

No importa si hablamos de tener éxito a modo en general en la vida o de alcanzar el éxito en un propósito concreto. Todo funciona exactamente de la misma forma, tanto si decidimos convertirnos en un excelente profesional, crear una empresa o perder peso.


El éxito no es nada fácil, pues como es evidente, de ser fácil todo el mundo lo alcanzaría, pero tampoco tiene un secreto al alcance de unos pocos privilegiados. Los pasos para conseguirlo son conocidos por todos, pero no todos están dispuestos a hacer el sacrificio.

Ésta es la parte más difícil del éxito

Ésta es la parte más difícil del éxito

Exacto, el éxito comienza por el dolor y el sacrificio. Y de eso los deportistas saben bastante. Si bien cada paso tiene un nivel de dificultad y de sacrificio, concretamente existe uno de ellos, en el que la mayoría de las personas exitosas coinciden que es el que a más personas tumba.

En primer lugar, para tener éxito hay que hacer lo que hasta ahora no hemos hecho, y por tanto, hay un grado de dificultad en acabar con ciertas costumbres y adquirir nuevas rutinas hasta que éstas formen parte de nosotros.

Es decir, si te has propuesto bajar de peso y ponerte en forma, tu vida sedentaria debe acabar, y debes dejar entrar el nuevo hábito de cada día hacer ejercicio, e incluir alimentos que antes no incluías en tu dieta, y dejar algunos alimentos que te llevan acompañando durante muchos años.

Lo mismo ocurre cuando dices de prosperar profesionalmente o en los negocios, y es que debes incluir hábitos como el aprendizaje, la lectura y ampliar tu círculo de contactos, e incluso asistir a otro tipo de eventos.

No hay éxito para la persona que no está dispuesta a esforzarse.


Cuando le preguntaron a Muhammad Ali cuántas abdominales hacía al día para tener ese abdomen, él respondió que no lo sabía exactamente, porque únicamente contaba a partir de las abdominales que le causaban dolor, pues esas eran las que le hacían ser el campeón. Dolor y sacrificio para ser un campeón.

Pero el sacrifico compensa cuando hay recompensa.


Y aquí vendría el punto clave de la desmotivación, y es que, como ya hemos dicho en otras ocasiones, el éxito no viene de forma lineal y/o ascendente. Es fácil sacrificarse y trabajar más duro cuando recibimos una recompensa, pero lo cierto es que hagamos lo que hagamos, pasaremos una etapa de dolor y esfuerzo sin recompensa, y precisamente, ésta es la etapa más dura del éxito, la etapa que más desmotiva, y la etapa en la que la mayoría de la gente abandona.

Una vez hemos incluido ciertas rutinas en nuestra vida, nos estamos esforzando al máximo dando lo mejor de nosotros mismos, siguiendo el plan que habíamos marcado, y no vemos resultados inmediatos, e incluso llegamos a ver que retrocedemos, es cuando el desánimo se apodera de nosotros, y únicamente los más fuertes mentalmente acaban pasando esta etapa.

Por ejemplo, si una persona decide perder peso, esta persona querrá ver los resultados lo más pronto posible, y si es una persona a la que le sobran 40 kilogramos, incluso perdiendo 5 kg, al mirarse al espejo no verá ningún cambio. Probablemente tenga algún altibajo en el que su peso vuelva a subir a pesar del sacrificio, y esa parte sería derrotadora.

Es cuando las personas tendemos a olvidar que la disciplina debe ir acompañada de paciencia, insistencia y consistencia, y confiar en que si hacemos lo correcto una y otra vez cada día de la semana, independientemente de los altibajos en el corto plazo, finalmente los resultados llegan.

Y por altibajos podemos hablar de la otra etapa más desmotivadora aún, que puede ser la gestión de un fracaso.

Si es duro esforzarse sin tener resultados inmediatos, el toparse con un fracaso, puede ser derrotador para una gran mayoría. Y lo cierto es que fracasar no tiene nada de bello, pero es cierto que un fracaso puede ser una excelente fuente de aprendizaje para no cometer nuevamente los mismos errores.

Finalmente, el secreto del éxito se podría definir como "acostumbrarse a vivir en el infierno durante un tiempo para alcanzar el paraíso" (esta frase la vi en alguna película). Aunque vuelva a sonar a lección de autoayuda, lo cierto es que el éxito únicamente está al alcance de aquellas personas que nunca abandonan a pesar de todas y cada una de las adversidades que se les presenten en el camino.

Como se suele decir, no has fracasado hasta que dejes de intentarlo, y por tanto, no fracasas hasta que en algún momento dejas de buscar el éxito. En el momento que te rindes, ya puedes decir que fracasaste.


Te puede interesar


El Arte de la Estrategia


Comentarios

  1. Nadie regala nada y todo cuesta su esfuerzo.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y el que se salta estas reglas, tarde o temprano lo paga (siempre hay excepciones).

      Un saludo.

      Eliminar
  2. Sin esfuerzo no se puede lograr nada. Y ese esfuerzo conlleva a disciplina y constacia, de lo contrario, no habrá tampoco éxito. La anécdota de Alí la conocía

    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero a todo eso hay que añadirle inteligencia y sentido del objetivo a lograr, de lo contrario, eres como un hamster corriendo en la rueda, que acaba agotado y no llega a ninguna parte.

      Saludos

      Eliminar
  3. Esfuerzo conducido, con una hoja de ruta, constancia, insistencia, resistencia, comprensión del entorno, revisión constante, son detalles que marcan la diferencia, y todos ellos cuentan, gracias por compartir.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La pregunta del barbero

Un hombre llamado Juan asomó la cabeza en la barbería de Paco y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar para un corte de pelo?" Paco, mirando la tienda llena de clientes, respondió: "Unas dos horas." Juan se marchó. Unos días después, Juan volvió a asomarse y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar hoy para un corte de pelo?" Paco, observando la tienda, dijo: "Unas tres horas." Juan se fue nuevamente. Una semana más tarde, Juan regresó y preguntó: "¿Cuánto tiempo tengo que esperar hoy para un corte de pelo?" Paco, revisando la tienda, respondió: "Unas hora y media." Juan se marchó una vez más. Paco, intrigado, se volvió hacia su amigo Luis y le dijo: "Oye, Luis, hazme un favor. Sigue a Juan y mira a dónde va. Siempre pregunta cuánto tiempo tiene que esperar, pero nunca regresa."  Ver Las 20 leyes de la astucia Un rato después, Luis regresó a la barbería, riéndose a carcajadas. Paco, curioso, preguntó: "¿...

El profesor y la alumna en privado

El profesor Johnson se encontraba absorto en sus papeles cuando unos suaves golpes en la puerta lo sacaron de su concentración. "Adelante", dijo sin levantar la vista. La puerta se abrió y se cerró rápidamente. El sonido de tacones sobre el suelo de madera lo hizo alzar la mirada. Allí estaba Emily, una de sus estudiantes más problemáticas, acercándose a su escritorio con una mirada que lo puso inmediatamente en alerta. Emily se inclinó sobre el escritorio, su blusa entreabierta revelando más de lo apropiado. El profesor Johnson contuvo la respiración, incómodo ante la situación.  "Puedo hacer lo que quieras", susurró Emily con voz temblorosa, "pero por favor... cambia mi última calificación. Lo necesito, o la administración me expulsará".  Ver Las 20 leyes de la astucia El corazón del profesor Johnson se aceleró, no por deseo, sino por compasión y preocupación. En los ojos de Emily vio desesperación, no seducción. Con calma, se levantó y abrió la puerta. ...

Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

El motivador cuento de la hormiga y la miel

El motivador cuento de la hormiga y la miel cautiva con su poderosa enseñanza: la moderación da paz, el exceso consume. Una gota de miel cayó al suelo. Una hormiguita, atraída por su dulzura, se acercó y la probó.  La miel era tan deliciosa que no pudo resistir la tentación de volver. Tomó otro sorbo, luego otro, cada vez más hechizada por este néctar divino . Pero pronto, la hormiga, insaciable, quería más. Decidió sumergirse por completo en la gota de miel, bañarse en ella, perderse en ella. Se sumergió, se envolvió, se ahogó. ¡Ay! La miel, tan dulce, se convirtió en su prisión. Sus patitas, pegajosas, ya no podían moverse. Luchó, luchó, pero en vano. La miel, lentamente, la rodeó, la inmovilizó, la asfixió. Y la hormiga, prisionera de su propia gula, pereció en esta dulzura mortal. Los Sabios dicen: "El mundo es solo una enorme gota de miel". El que se contenta con probarlo con moderación encuentra la paz. Pero el que se sumerge en ella, codicioso e insaciable, es tragad...

El médico chino

Un médico chino no puede encontrar trabajo en un hospital en EE. UU., así que abre su propia clínica. Pone un letrero afuera que dice: "TRATAMIENTO POR $20 - SI NO SE CURA, RECUPERE $100. " Un abogado estadounidense piensa que esta es una gran oportunidad para ganar $100 y va a la clínica. Abogado: "He perdido mi sentido del gusto." Médico chino: "Enfermera, traiga la medicina de la caja Nº 14 y ponga 3 gotas en la boca del paciente." Abogado: "¡Puaj! Esto es queroseno." Médico chino: "Felicidades, su sentido del gusto está restaurado. Deme mis $20." El abogado, molesto, regresa unos días después para intentar recuperar su dinero. Abogado: "He perdido la memoria. No puedo recordar nada." Médico chino: "Enfermera, traiga la medicina de la caja Nº 14 y ponga 3 gotas en su boca." Abogado (molesto): "Esto es queroseno. Me diste esto la última vez para restaurar mi gusto." Médico chino: "Felicidades. Ha rec...