El Imperio Romano fue uno de los imperios más poderosos e influyentes de la historia del mundo, habiendo conquistado vastos territorios y subyugado a numerosos pueblos bajo su dominio. Sin embargo, una región que resultó ser un desafío importante para los romanos fue Escocia. Los ejércitos romanos intentaron conquistar Escocia tres veces, pero finalmente no tuvieron éxito, y la historia de la Escocia romana es una historia de invasión y retirada. Ver La Legión romana desaparecida La conquista romana de Escocia comenzó en serio en los años 70 d.C., y bajo el emperador Vespasiano y sus hijos, el gobernador Agrícola condujo a las legiones hacia el interior de Caledonia. Los ejércitos romanos ganaron una gran batalla en Mons Graupius, en algún lugar del noreste de Escocia, pero a los pocos años abandonaron sus conquistas y se retiraron. Primero se retiraron a un territorio más seguro en el sur de Escocia, y luego al norte de Inglaterra entre el río Tyne y el estuario de Solway, donde cons