Desarrollar sabiduría para abordar las cosas con serenidad parece ser una excelente manera de enfrentar los desafíos que nos tocan.
En un mundo cada vez más inquieto, que se enfrenta a grandes cambios, dar un paso atrás parece bastante salvador. En este artículo, propongo profundizar en esta noción y descubrir cómo trabajar con ella.
Desarrolla tu sabiduría de 7 maneras |
¿Qué es la sabiduría?
Hoy en día, la sabiduría se define como la capacidad de encontrar soluciones prácticas, creativas, contextualmente relevantes y emocionalmente satisfactorias a problemas humanos complicados. Si bien la sabiduría comparte varias cualidades con la inteligencia y la espiritualidad, estos tres conceptos son bastante distintos. La virtud que aquí nos interesa es vista como un rasgo multidimensional, útil tanto para el individuo como para la sociedad.
Evidentemente, el hecho de ser "sabios" permite florecer más y soportar mejor las adversidades. La sabiduría también tiene efectos positivos sobre la salud y el bienestar. Por lo tanto, es un activo importante para cualquiera que busque ganar en eficiencia y tranquilidad.
Sin embargo, el estudio de esta dimensión por parte de los científicos es bastante reciente. Esto se debe a su complejidad. Antes de la década de 2000, este tipo de concepto parecía imposible de estudiar científicamente. Es avanzando en el estudio de muchas otras dimensiones psicológicas como hemos podido definir mejor este concepto y medirlo. Hoy en día, existen incluso cuestionarios para evaluar el nivel de sabiduría de un individuo.
7 maneras de desarrollar la sabiduría
Todos podemos ganar en sabiduría: no es necesario esperar hasta los 70 u 80 años para eso. Además, el vínculo entre la sabiduría y la edad no es tan evidente y automático como podría pensarse.
Como la sabiduría se puede dividir en 7 componentes, sugiero formas de desarrollar cada uno de ellos a continuación. Sin embargo, ten en cuenta que las dimensiones que más importan en la sabiduría son los comportamientos prosociales, la regulación emocional y el asesoramiento social. La introspección, la mentalidad abierta y la capacidad de tomar decisiones son un poco menos centrales, pero siguen siendo importantes. La espiritualidad, recientemente añadida a la definición de sabiduría, tiene un impacto menor en el nivel general de sabiduría. Es en este orden como te voy a presentar formas de trabajar en el desarrollo de tu sabiduría.
1. Desarrollar conductas prosociales
Estos incluyen la empatía, la compasión, el altruismo y el sentido de la justicia. En particular, ayudan a mantener conexiones sociales positivas.
Para desarrollarlos puedes:
- Ponte en el lugar de los demás.
- Busca comprender las experiencias de las personas en situaciones diferentes a la tuya. ¿Cómo viven? ¿Cómo trabajan? ¿Qué problemas encuentran?…
- Pasa tiempo con los demás para entenderlos. ¿Qué les trae felicidad? ¿Cuáles son sus sueños? ¿Qué obstáculos encuentran?
- Establece relaciones con personas que ya conoces, pero con las que normalmente no te conectas.
- Realizar actos de bondad al azar. Los pequeños actos de bondad traen felicidad a quienes los realizan. Cualquier entorno se presta para ello. De hecho, la generosidad en el trabajo reduce el riesgo de agotamiento, mientras que la generosidad en la pareja hace que la relación romántica sea más satisfactoria y duradera.
Varios estudios han demostrado que repetir actos de bondad incidentales durante 6 semanas mejora el bienestar. Pequeños gestos simples que traen un poco de positivo a los demás, aumentan las emociones positivas y reducen las emociones negativas.
2. Aprende a regular tus emociones
Se trata de desarrollar la capacidad de regular las emociones negativas y el estrés que interfieren en la toma de decisiones. Regular las propias emociones implica también ser capaz de fomentar emociones positivas.
Pero cuidado, no te estoy animando a reprimir toda emoción y vivir como un robot, ¡sino todo lo contrario! Las emociones tienen una utilidad innegable porque nos aportan información valiosa sobre lo que ocurre en nosotros y a nuestro alrededor. El objetivo es, por tanto, no dejar de sentir nada, sino precisamente sentir plenamente las emociones cuando nos parezca relevante y útil. En otras situaciones, las tendremos en cuenta sin agobiarnos, para evitar un posible efecto contraproducente.
En resumen, esto es exactamente lo que defiende el enfoque de la atención plena y la meditación. En estas prácticas buscamos observar lo que sucede en nuestro interior para reintroducir un espacio de libertad en relación con nuestros pensamientos y nuestras emociones. Entonces podemos optar por saborear plenamente una emoción, o por el contrario simplemente tomar en cuenta lo que nos dice mientras la regulamos.
También es posible implementar enfoques para el manejo del estrés (o "afrontamiento") para aprender a manejar las propias emociones.
3. Desarrolla tu capacidad de ayudar a los demás
Cultivar la capacidad de ayudar a los demás tiene como objetivo desarrollar la subdimensión de la sabiduría llamada "consejería social". Para trabajar en esto, puedes:
- Practica la escucha activa. Esta consiste en prestar toda la atención a lo que expresa nuestro interlocutor y concentrarnos en éste más que en nuestros pensamientos y nuestro diálogo interno. Se trata de interesarse sinceramente en lo que se dice y revivir a la persona escuchada para ayudarla a desarrollar sus pensamientos. Esto nos permite entender mejor cómo funcionan nuestros interlocutores, pero también ganar perspectiva sobre los procesos emocionales. Para escuchar bien, y escuchar plenamente, te invito a seguir los siguientes consejos:
- Ponte en el lugar de tu interlocutor. Elige una relación en la que quieras trabajar. Ponte en el lugar de la persona. Cuando hable, intenta en la medida de lo posible adoptar su punto de vista. Por ejemplo, imagina que eres esa persona, ocupándote de sus asuntos.
- “Verifica los hechos” de tus interpretaciones. Piensa en las interacciones que tuviste con esta persona. Haz un esfuerzo consciente para verificar tus suposiciones e interpretaciones sobre lo que la persona te ha dicho.
- Presta tu atención completa e indivisa. Durante una conversación, comienza prestando toda tu atención a la otra persona. Antes de continuar, piensa qué pasaría si hicieras la siguiente pregunta: “Quisiera comprobar que entendí lo que me dijiste. ¿No te molesta? La mayoría de las veces, obtendrás una respuesta positiva.
- Aclarar lo dicho. Haz un esfuerzo por aclarar lo que crees que escuchaste. Identificar y explicar las emociones percibidas. Si no estás seguro de haber entendido correctamente, haz la pregunta.
- Aclara lo que dijiste. Durante las conversaciones, puedes preguntarle al otro si puede compartir lo que entendió de lo que dijiste. Piensa en cómo podrías aclarar malentendidos y malas interpretaciones.
4. Conocerte mejor
La sabiduría comienza ante todo con un buen conocimiento de uno mismo y de tu funcionamiento. Para avanzar en esta área, puedes practicar el balance semanal. Este enfoque te permite desarrollar una visión panorámica de sus proyectos, deseos, dificultades, etc. La idea es reservar unos minutos cada semana para comprobar lo que te queda por hacer, identificar proyectos pendientes y hacer balance de lo realizado en los días anteriores. Ganarás así en control y en perspectiva para el futuro. Aquí hay un guión para ayudarte:
- ¿Qué has logrado esta semana? ¿Qué objetivos o proyectos se han completado?
- ¿Cuál es tu experiencia subjetiva durante la última semana?
- ¿Qué aprendiste en particular esta semana? ¿Qué lecciones puedes extraer de eventos pasados y acciones tomadas?
- ¿Qué tienes que hacer en la próxima semana? ¿Puedes adaptar las cosas en base a lo que te han enseñado los días anteriores? ¿Algún proyecto requiere una reorganización o un punto más profundo?
Organiza tus acciones, proyectos y prioridades para la próxima semana en base a esta evaluación.
5. Aprende a mantener la mente abierta
Desarrollar la sabiduría también implica cultivar la humildad intelectual. Permaneciendo abierto a puntos de vista distintos al propio se aprende a comprender a los demás y se siguen descubriendo nuevas oportunidades y posibilidades a lo largo de la vida.
Comprender mejor a los demás requiere la movilización explícita de nuestra curiosidad. Para hacer esto, te invito a probar los siguientes enfoques:
- Pasa tiempo con personas que conoces menos y hazles preguntas sobre sus intereses, antecedentes, etc.
- Sigue a personas de diversos orígenes y procedencias (religiosas, étnicas, políticas) en las redes sociales y escucha lo que tienen que decir.
- Estar verdaderamente presente y atento cuando interactúes con los demás. Busca identificar temas que los hagan emocionantes, tristes o felices.
- Visita nuevos lugares, interactúa con los lugareños y sumérgete en su forma de vida.
- Cultiva el deseo de aprender y también un enfoque pertinente.
6. Toma decisiones de manera efectiva
Una persona sabia también es capaz de tomar decisiones con eficacia la mayor parte del tiempo. Esto significa no sólo que las decisiones tomadas sean de mejor calidad, sino también que estas se tomen en un tiempo razonable. Por lo tanto, es necesario buscar una buena solución sin posponer indefinidamente su reflexión, en lugar de querer buscar siempre "la" mejor solución durante semanas. Para ello, debes empezar por establecer buenos criterios de decisión. Estos servirán como filtros para identificar una opción satisfactoria para ti. Aquí están las diferentes categorías de criterios útiles para tomar una buena decisión en un tiempo razonable:
Los elementos esenciales. Si no se cumplen estos criterios, se elimina la opción.
- Deseables. Sería preferible que estuvieran presentes, pero si no es así, podemos acordar prescindir de ellos. Es posible establecer una proporción mínima de criterios deseables que deben cumplirse para validar una opción (por ejemplo: 2 de 4 identificados).
- Los bonos. Si estos están presentes, genial. Estos criterios son un poco como la "guinda del pastel". Si no están presentes, no importa. Estos criterios de bonificación también se pueden identificar a posteriori.
El objetivo es poder tomar una decisión satisfactoria rápidamente. Así que no pierdas horas fijando tus criterios, y ponte un límite de tiempo para la toma de decisiones. Una vez que hayas hecho tu elección, aprovecha al máximo la opción elegida. Hacerlo es menos estresante y promueve el florecimiento en un mundo de crecientes opciones y oportunidades.
7. Cultiva tu espiritualidad
La espiritualidad incluye la conexión con uno mismo, con la naturaleza o con algo trascendente (el alma, Dios, etc.). Ten en cuenta que "espiritual" no significa necesariamente "religioso", aunque estos dos aspectos pueden estar vinculados. La idea es más bien reflexionar sobre el sentido de la vida, y sobre todo sobre el sentido o la finalidad que se le quiere dar a la propia vida. Esta perspectiva ayuda a replantear ciertos eventos y puede facilitar ciertas decisiones. En esto, esta toma de altura contribuye a la sabiduría, siempre que se base en un verdadero trabajo de reflexión.
Recomendaciones
No siempre es fácil ser sabio. Por supuesto, los errores son parte del aprendizaje, y la espontaneidad es algo precioso que debe ser preservado. Adquirir sabiduría no implica privarse de la curiosidad y el deseo de descubrir cosas nuevas. Claramente, ser sabio no significa saberlo todo. Se trata más bien de cuestionarse constantemente, para seguir progresando.
Todos nos hemos arrepentido de haber sido imprudentes alguna vez. Además, cultivar esta cualidad nunca es algo malo. Ya sea para mejorar la propia vida o la de quienes nos rodean, es un paso útil. También nos permite integrar nuestro entorno y temas más amplios que los de nuestra vida cotidiana en nuestro pensamiento.
Entonces, comencemos escuchando sinceramente a los demás y manteniendo la curiosidad. ¡La sabiduría viene de la humildad, no de la profesión de conocimiento!
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Genial escrito que nos hace aprender de la diferencia entre inteligencia y sabiduría muy importante para una vida de calidad muy bien redactado daba la impresión con un poco de imaginación que estabas recibiendo una conferencia magistral con práctica incluida gracias y felicitaciones a quien lo escribió aprendí muchísimo para saber vivir y actuar mejor en cada momento o dificultad que me presente la vida
ResponderEliminarEs realmente muy bueno!!! ✨
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