El cuerpo humano tiene una increíble capacidad de recuperación, y dejar de fumar es uno de los mayores regalos que puedes darle a tus pulmones y a tu salud en general. Según la doctora Elena Forcen, del MD Anderson Center de Madrid, los beneficios de dejar el tabaco comienzan a sentirse en cuestión de horas y se vuelven aún más evidentes con el paso del tiempo. Después de 8 horas El flujo de oxígeno en el cuerpo mejora significativamente. Comienza a notarse un cambio en los sentidos: el olfato y el gusto, antes embotados por el humo, empiezan a recuperarse. Además, la calidad de la piel mejora, ganando en luminosidad y elasticidad. Después de 12 horas El monóxido de carbono, un gas tóxico presente en el humo del tabaco, desaparece del cuerpo. Los niveles de oxígeno en sangre vuelven a su normalidad, lo que facilita una mejor oxigenación de los órganos. Después de 24 horas El riesgo de un ataque cardíaco comienza a disminuir. Dejar de fumar reduce la presión arterial y mejora ...