No me refiero a la segregación racial, que quede claro desde el principio. En la Unión Europea y en USA, se ha logrado que los fumadores dejen de molestar con el humo de su vicio en lugares públicos, ya sea transportes colectivos, bares, oficinas, restaurantes, etc. Eso es segregación. Propongo la misma medida de segregación con los teléfonos celulares: tratar a los adictos como a los apestados del tabaco.
De hecho, ya hay restaurantes donde entrar te recogen el maldito aparatito, por respeto preventivo al resto de comensales. Hay ocasiones que es insufrible un recorrido en transporte público, ya sea urbano o de largo recorrido. Si juntas el sordo que aun llevando auriculares molesta con su música (estará sordo o irá de camino a la sordera), el tontolaba que vocifera sin descanso por su telefonito, al tarado que juega al jueguecito atontador de turno sin quitarle el sonido y al dedo veloz que manda y recibe mensajes de texto de forma compulsiva con su correspondiente campanazo, empieza a ser muy, pero que muy difícil no chocar con cualquier tipo de estos zombis que empiezan a ser legión.
Quiero que vuelva la segregación ya, no por la raza, sino por el uso del celular |
Me importa un carajo si lo de estas gentes es adición o cualquier otro nombre inventado por psicólogos ávidos de cobrar por enfermedades reales o imaginarias. Los que tenemos educación y usamos poco o nada estos artilugios no tenemos por qué aguantar a semejante masa de semiandroides hipnotizados con ruido incorporado. Así que mientras nuestros gobernantes toman medidas sobre el asunto (me troncho de risa solo de pensarlo) y mientras la sociedad empieza a ser medianamente educada (me sigo tronchando de risa), ahí van varias ideas además de la que sufrió Susi:
- Hay un aparatejo, no barato precisamente, que inhibe la telefonía móvil. Ignoro si es legal, ilegal o alegal. Pero es algo a considerar. No eliminas los sordos con auriculares ni a los jugadores que no suprimen el sonido, pero te ahorras campanazos de whatsapp o similares y conversaciones demenciales, que no es poco
- Si no puedes con ellos, súmate a ellos y rebásales. Entra al local o transporte con un aparato de música tipo años 80 en Harlem a todo volumen y cuando alguien se queje, dices que o todos en silencio o todos molestando.
- Contraataca con algún perfume apestoso de lo que se venden en tiendas de chinos. Vacíalo todo en un lugar donde a ti no te moleste (y también haya zombis) o justo en el momento de abandonar el local o el transporte. Habrá daños colaterales de víctimas inocentes, pero la guerra es así, que le vamos a hacer.
El objetivo final es que estos yonkis no molesten a los humanos no dependientes. Segregación ya: separación por zonas (tontolabas con aparatito y no tontolabas) y legislación restrictiva. Antes podíamos acusar a alguien de ser o parecer un gilipollas, pero faltaban las pruebas. Ahora está claro, ellos mismos se delatan.
Son multitud y nosotros cada vez somos menos y sé que la lucha es fiera y desigual, pero de grandes retos se logran grandes victorias. Con imaginación y una lucha persistente de guerrillas la victoria será muestra: estos zombis no tienen ninguna posibilidad.
Hasta la victoria siempre. Segregación (1) para los zombis. Todo esto dicho con buen rollito ecológico, sostenible, con igualdad de géneros y generas y tal y tal.
(1) Definición de segregación aquí.
No dejo que los pacientes entre con el móvil encendido. Está puesto un cartel en la puerta de la consulta avisando esto. Una vez alguien puso una reclamación, porque esperaba una llamada importante y la perdió cuando entró a mi consulta (según él)...Ya ves,se confunde libertad con libertinaje.
ResponderEliminarSaludos Carolus
Creo que todo se reduce a tener educación. Pero para muy largo lo fío para que veamos mejoría en costumbres...
EliminarSaludos, Manuel
Me apena ver a esos chavales practicando el autismo solitario con sus aparatos que valen una fortuna. Sólo se comunican a través de cacharros móviles. A lo mejor sus padres están en paro. Hay que darles una colleja... a los padres.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues por mi parte, no solo veo chavales, esta moda no respeta ni sexos ni edades. Mas que una colleja, harían falta varios "tíos de la vara"
EliminarUn saludo