Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como madre

Los delfines ven al bebé en el vientre de la madre

Uno de los datos más increíbles sobre los animales es que los delfines muestran un interés inusual en las mujeres embarazadas.  Se cree que esto se debe a su capacidad de ecolocalización , un principio similar al ultrasonido que les permite emitir sonidos y "escuchar" los ecos que regresan, identificando formas y objetos en su entorno. Esta habilidad permite a los delfines detectar la presencia del bebé en el vientre de la madre. La ecolocalización es una herramienta fascinante que los delfines utilizan no solo para navegar y cazar en el océano, sino también para interactuar de manera única con otras criaturas, incluyendo los humanos. La curiosidad y la inteligencia de los delfines continúan sorprendiéndonos y mostrando lo complejos y maravillosos que son estos animales marinos. Y tú, ¿qué opinas? Te invito cordialmente a compartir esto con todos tus amigos. Tu apoyo significa mucho. ¡Gracias de antemano!

Amor de madre

Esta es la historia real de una madre que fue víctima de un gran terremoto en China.  Después de que el devastador terremoto disminuyó, los rescatistas llegaron a la casa derrumbada de una joven, cuyo cuerpo era visible a través de las grietas causadas por el sismo. La figura tenía una apariencia extraña, como si estuviera arrodillada en posición de oración, con el cuerpo inclinado hacia adelante y las manos sosteniendo algo. La casa derrumbada le había golpeado la espalda y la cabeza. El líder del equipo de rescate metió la mano a través de un estrecho hueco en la pared y alcanzó el cuerpo de la mujer. Esperaba que estuviera viva; sin embargo, su cuerpo frío y rígido indicaba claramente que había fallecido. El equipo decidió abandonar la casa y buscar en el siguiente edificio colapsado. Pero por alguna razón, el líder sintió la necesidad de regresar a la casa de la mujer. Se arrodilló de nuevo y metió la mano por el estrecho hueco para explorar el pequeño espacio bajo el cadáver. ...

El poder de las palabras

Un día, Thomas Alva Edison llegó a casa y le dio a su mamá una nota. Él le dijo a ella: "Mi maestro me dio esta nota y me dijo que solo se la diera a mi madre." Los ojos de su madre estaban llenos de lágrimas cuando ella leyó en voz alta la carta que le trajo su hijo. "Su hijo es un genio, esta escuela es muy pequeña para él y no tenemos buenos maestros para enseñarlo, por favor enséñele usted". Entonces la madre se dedicó a enseñarle a Edison. Muchos años después la madre de Edison falleció, y él fue uno de los más grandes inventores del siglo. Un día él estaba mirando algunas cosas viejas de la familia. Repentinamente él vio un papel doblado en el marco de un dibujo en el escritorio. Él lo tomó y lo abrió. En el papel estaba escrito: "Su hijo está mentalmente enfermo y no podemos permitirle que venga más a la escuela." Edison lloró horas, entonces él escribió en su diario: "Thomas Alva Edison fue un niño mentalmente enfermo, pero por una madre heroi...

La madre feliz

Mi mama tenía muchos problemas. No dormía y se sentía agotada. Era irritable, gruñona y amargada. Siempre estaba enferma, hasta que un día, de pronto, ella cambió. La situación estaba igual, pero ella era distinta. Cierto día, mi papa le dijo: - Amor, llevo tres meses buscando empleo y no he encontrado nada, voy a tomarme unas cervecitas con los amigos. Mi mama le contestó: - Está bien. Mi hermano le dijo: - Mamá, voy mal en todas las materias de la Universidad... Mi mama le contestó: - Está bien, ya te recuperarás, y si no lo haces, pues repites el semestre, pero tú pagas la matrícula. Mi hermana le dijo: - Mamá, choqué el carro. Mi mama le contestó: - Está bien hija, llévalo al taller, busca cómo pagar y mientras lo arreglan, movilízate en autobús o en el metro. Su nuera le dijo: - Suegra, vengo a pasar unos meses con ustedes. Mi mama le contestó: - Está bien, acomódate en el sillón de la sala y busca unas cobijas en el clóset. Todos en casa de mi mamá nos reunimos preocupados al ver...

Humanidad

El incidente tuvo lugar en abril de 2014 en la ciudad de Nowshahr, en el norte de Irán.  El condenado, Balal, había sido sentenciado a muerte por asesinar a Abdollah Hosseinzadeh durante una pelea callejera en 2007, cuando ambos eran adolescentes. El día de la ejecución, Balal fue llevado a la horca y se le colocó la soga alrededor del cuello. Según la ley islámica de "qisas" (retribución en especie), la familia de la víctima tiene el derecho de perdonar al asesino en el último momento. Samereh Alinejad, la madre de Abdollah, se acercó a Balal y, en un gesto sorprendente, le dio una bofetada en la cara. Sin embargo, en lugar de proceder con la ejecución, ella y su esposo retiraron la soga del cuello de Balal, perdonándolo. La decisión de perdonar a Balal no fue repentina. Samereh había tenido un sueño en el que su hijo fallecido le pedía que perdonara a su asesino. Además, ella declaró que no quería que la madre de Balal sufriera la pérdida de un hijo como ella lo había...

El cofre de vidrios rotos

Érase una vez un anciano que había perdido a su esposa y vivía solo.  Había trabajado duramente como sastre toda su vida, pero los infortunios lo habían dejado en bancarrota, y ahora era tan viejo que ya no podía trabajar.  Las manos le temblaban tanto que no podía enhebrar una aguja, y la visión se le había enturbiado demasiado para hacer una costura recta. Tenía tres hijos varones, pero los tres habían crecido y se habían casado, y estaban tan ocupados con su propia vida que sólo tenían tiempo para cenar con su padre una vez por semana. Ver Guía para quienes cuidan padres mayores El cofre de vidrios rotos El anciano estaba cada vez más débil, y los hijos lo visitaban cada vez menos. - No quieren estar conmigo ahora -se decía- porque tienen miedo de que yo me convierta en una carga. Se pasó una noche en vela pensando qué sería de él y al fin trazó un plan. A la mañana siguiente fue a ver a su amigo el carpintero y le pidió que le fabricara un cofre gra...

El niño y el jabón

Un muchacho pobre, de alrededor de doce años de edad, vestido y calzado de forma humilde, entró en una tienda, eligió un jabón común y le pidió al propietario que se lo envolviera para regalo. "Es para mi madre", dijo con orgullo. El dueño de la tienda se conmovió ante la sencillez de aquel regalo. Miró con piedad a su joven cliente y, sintiendo una gran compasión, tuvo ganas de ayudarlo. Ver  ¿Se pueden perdonar los traumas de la infancia? Pensó que podría envolver, junto con el jabón tan sencillo, algún artículo más significativo. Sin embargo, estaba indeciso: miraba al muchacho, miraba los artículos que tenía en su tienda, pero no se decidía. ¿Debía hacerlo o no?. El corazón decía que sí, pero la mente le decía no. El muchacho, notando la indecisión del hombre, pensó que estuviera dudando de su capacidad de pagar. Llevó la mano al bolsillo, retiró las moneditas que tenía y las puso en el mostrador. Continuaba el conflicto mental. Ya había concluido que, si el m...

¿Hay vida después del parto?

¿Hay vida después del parto? Se preguntaban dos fetitos gemelos... Dos niños gemelos (A y B) que todavía están en el vientre de su mamá.  ¿Hay vida después del parto?  A. Sí, claro que existe vida después del parto. Nuestra vida aquí está planeada sólo para que crezcamos y para que nos preparemos para la vida después…. B. ¡Qué tontería! ¿Qué cosas dices? Eso no es posible. No puede existir. ¿Cómo podía ser la vida después del parto? A. Yo tampoco lo sé muy bien. Pero seguro que será muchísimo más clara y más luminosa que aquí. Y a lo mejor comeremos por la boca (no sólo el dedo), y podremos correr. B. ¡Qué bobo eres si crees en esas cosas! ¿Correr? ¿Comer por la boca? ¡Qué ridículo sueño! Tenemos nuestro cordón que nos alimenta, y no sería posible vivir sin él después del parto. A. No, no es así. Seguro que es posible. Lo que ocurre es que todo será un poco de otra manera. B. Además nadie ha vuelto después del parto. La vida termina con él y e...