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Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

El buen ministro según Quevedo

Dice Quevedo: No es buen ministro el que mira por la seguridad del príncipe y por su descanso y el de sus allegados: sólo ése, si olvida los pobres, en nada sabe lo que se dice. Sólo es buen ministro quien derechamente mira a los necesitados.

El buen ministro según Quevedo
Quien da al poderoso compra, y no da; mercader es, no dadivoso; logro es el suyo, no servicio; más pide dando que pidiendo, porque pide obligando a que le den. Quien pide para el que manda, toma para sí: cautela es, no caridad; no sabe lo que dice; y el mejor remedio es saber lo que con él se ha de hacer. Y copie vuestra majestad [...] que de los ministros que con afectación se le mostraren muy celosos de su reposo y descanso, tenga más sospecha que satisfacción; y esté vuestra majestad acautelado contra este género de amor que peca en trampa contra la autoridad; pues tanto es mayor el interés del que puede, cuanto más le deja el rey que haga de lo que a él sólo toca: haláganle con el sosiego, y desautorízanle y desacredítanle con el divertimiento del cargo real. [...]

Pues si el Hijo de Dios se recata de sus doce apóstoles, porque entre ellos hay un Judas, ¿qué han de hacer los príncipes servidos de malos ministros, que entre doce Judas quiera Dios que apenas tengan un apóstol?

Fuente:

Comentarios

  1. Doc Manuel, siempre visita este blog a diario y me deja un inteligente comentario, de lo que le estoy muy agradecido. No sé si se ha dado cuenta que generalmente cada día hay mas de un post. Con esto no le digo que puede hacer un comentario en cada uno de ellos. Simplemente, le invito a que disfrute de todos ellos, pues su visita me honra.

    Saludos

    Carolus

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  2. Hola Carolus:

    Si me doy cuenta que hay otros post el mismo día. Si los leo. En algunos casos no puedo comentar por los duendes (o robots) de blogger. A veces ni puedo comentar en el mio...

    Vengo aquí por que me gusta el enfoque maquiavélico (de maquiavelo) que hay en la estrategia. Y cada entrada se puede aplicar incluso a mi práctica diaria, en la consulta cómo esta de Quevedo. Los que tienen se valen por si mismos, el resto hay que ayudarle a valerse.

    Me honran estas palabras.

    Saludos Carolus

    ResponderEliminar

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