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Las 20 leyes de la astucia

El arte de moverte con inteligencia en un mundo lleno de apariencias ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas siempre salen ganando, incluso en las peores situaciones? ¿Te gustaría entender cómo piensan los que realmente mandan… y aprender a jugar con sus mismas cartas? Las 20 leyes de la astucia es el manual definitivo para quienes quieren dejar de ser ingenuos y empezar a moverse con cabeza en la vida . Este libro no es teoría vacía ni frases motivacionales: es estrategia pura, clara y directa. ¡Haz clic aquí para leer una muestra ahora! Te ofrece unas herramientas prácticas para: Entender los juegos ocultos de poder e influenci a. Detectar segundas intenciones y protegerte de ellas. Influir sin imponer, ganarte el respeto sin alzar la voz. Tomar decisiones con inteligencia emocional y visión estratégica. Convertirte en alguien más difícil de manipular , más sólido y respetado. Imagina tener la capacidad de leer entre líneas, anticiparte a los movimientos de los dem...

¿Por qué te quejas a menudo?

Muchas personas se han convertido en profesionales en la queja. El psicólogo estadounidense Guy Winch nos da las razones y ayuda a salir de esta espiral negativa.

Crees que es más fuerte que nosotros. A la menor olvido por parte de otros (el aniversario de tu relación, el espectáculo de teatro al que te encantaría ir), te apresuras por teléfono a refunfuñar en los oídos de tu mejor amigo.

¿Por qué te quejas a menudo?
 ¿Por qué te quejas a menudo?

Tu colega de oficina se queja en la máquina de café sobre los problemas de transporte, a lo que suma los fallos en la educación nacional. A veces podemos sentir que la queja está en todas partes. ¿Nos hemos convertido todos en quejosos "pro"? ¿Qué esconde la "actitud gruñona" que parece ganar el mayor número? El psicólogo estadounidense Guy Winch, en su libro "El arte de quejarse..." va al escáner nuestros "quejicas" y nos da pistas para ser escuchados, ¡de manera diferente!

¿La queja se ha vuelto crónica e improductiva?

La lista de motivos de queja sigue creciendo. En realidad, diferentes factores la motivan, los más frecuentes son emocionales o sociales. Para el psicólogo Guy Winch, se produce como resultado de la frustración, por ejemplo, ante una espera prolongada de un técnico. Nuestra irritación está aumentando y la estamos dejando saber.

Si el fenómeno no es nuevo, por otro lado lo que alerta al psicólogo es que se ha vuelto crónico e improductivo. Según él, "evacuamos nuestro lamento en un soplo de auténtica irritación, solo para parecer satisfechos de verlo flotar y pegarse al techo, ¡donde se desinflará sin dar nada en absoluto!"

¿A quién podemos quejarnos?

¡A veces las quejas son "emocionales"! Según Guy Winch, el propósito principal de quejarse es evacuar las emociones negativas: " buscamos obtener la liberación catártica de la tensión interior".

Claramente, primero buscamos "purgarnos" la irritación, la ira causada por la insatisfacción. En un segundo paso, inconscientemente queremos una validación emocional del "daño" que hemos sufrido.

¿Por qué te quejas a menudo?

En la práctica: La expresión en voz alta de una queja es interesante, siempre y cuando, por supuesto, elijas al interlocutor adecuado. Guy Winch recomienda evitar, por supuesto, las incógnitas relativas, probablemente muy poco preocupadas por su angustia. Cuando se trata de un amigo, asegúrate de que esté de humor para mostrar solidaridad y comprensión. Si esta persona está pasando por dificultades, puede parecer prudente guardar tus "pequeñas miserias" (incluso si te parecen grandes) para ti mismo.

Si se vuelve crónica: nuestro especialista recomienda en este caso dirigirla a la persona interesada, una madre demasiado invasiva, una amiga que llega siempre tarde, formulándola de forma constructiva. Después de preguntarse, ¿cuál era su verdadera necesidad oculta detrás de la queja?

La queja para crear lazos sociales

Si mezclas tu voz con los que regañan en bucle de "se ha vuelto imposible aparcar donde vivo", "La sociedad está empeorando cada vez más", "Francamente, la televisión se está deteriorando", es muy posible que tus quejas sean del tipo "social".

Para Robin Kowalski, profesor de psicología en la Universidad de Clemson, nuestras quejas también cumplen funciones sociales. Facilitarían las interacciones en la sociedad. Una forma real de iniciar una conversación nos permite encontrar un terreno común para establecer nuestros intercambios. Cuando te quejas con un amigo (incluso si no te importa) creas un vínculo.

¿Cómo dejar de quejarse?

Si se vuelve crónico: para Guy Winch, nuestras expectativas han aumentado considerablemente en los últimos  50 años. De ahí el mal uso de la queja como herramienta de comunicación. Exigimos un mejor servicio, resultados más eficientes y una actitud acorde con nuestros deseos, por parte de nuestros proveedores de servicios.

Tal vez primero podamos bajar nuestras expectativas, y luego podamos equilibrar lo que se puede cambiar, lo que no se puede cambiar. Tantas vías que deberían hacer posible encontrar nuevos puntos en común, más optimistas. No dudes en practicar la meditación, en recordar 5 puntos positivos del día pasado, en escribir en un papel tus quejas y en destrozarlas...

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