¿Cuándo fue la última vez que aprendiste algo? ¿Eres capaz de recordarlo?
Si eres estudiante, probablemente me dirás que hace muy poco, así que reformularé la pregunta: ¿cuándo fue la última vez que aprendiste algo útil?
Si eres sincero contigo mismo, tal vez te sorprenda la pregunta. Pasamos los días, las semanas y los meses, seguimos unas rutinas y ahí nos quedamos estancados. Tal vez, si tienes pasión por tu trabajo o por una afición, tu aprendizaje es continuo y disfrutas haciéndolo. Además, no te cuesta esfuerzo. Enhorabuena, no eres una persona corriente, cada día sabes más, y lo bueno es que nadie te lo puede quitar.
Nos están machacando por los medios de comunicación en que la educación es cara y que se está atacando a la cultura. Para variar, es una verdad a medias, en el mejor de los casos.
Hay una educación que cuesta cara, es cierto. Esta educación consiste en asistir a centros privados, donde el alumno se junta con otros compañeros de alto poder adquisitivo donde traban amistades que les serán de utilidad años mas tarde. Esta educación, al igual que la de centros públicos, se resume en que tras superar duras pruebas (también he pasado por ello), al final te dan un título. Lo que está muy bien, pero eso es todo. Mi experiencia es que después de eso, toca aprender DE VERDAD.
Lo último que aprendiste |
En cuanto a la cultura, me temo que todo lo que resuena por los medios son unos lobbys que solo velan por sus intereses. No sé cuál es mi grado de cultura, pero no me siento inculto. Lo más gracioso es que me ha costado muy poco dinero, mas tarde me explicaré. Muchos compañeros míos que han hecho más carrera que el que esto escribe, no se han enfocado tanto en culturizarse. Porque, en realidad, ¿qué es la cultura? Al igual que la misma pregunta sobre el arte, no hay definiciones absolutas. La que más me gusta es la que la define como lo que nos queda cuando hemos olvidado todo lo aprendido.
Dicen que leer es bueno. A priori, es mejor que no hacerlo. Pero, como dijo un tipo muy listo, la vida es breve y conviene saber y elegir qué se lee, pues de ello alcanzaremos más sabiduría. En mi opinión, lo óptimo es leer donde se pueda aprender. Y leer es educación y es gratis. Si, como suena, es gratis. Hace siglos, la lectura era privilegio de los nobles, pero desde principios del siglo XX es gratis. Es tan gratis como usar bibliotecas públicas. He usado y abusado de ellas y me han servido bien, tanto para educarme como para culturizarme. Tú puedes hacer lo mismo, además, no hay colas ni muchedumbres ni competencia.
Pero las bibliotecas, con todo el respeto que les tengo, no son nada con la biblioteca que llevas en el bolsillo. Me refiero al aparato que la mayoría de las personas usa para: 1) whatsapp 2) facebook 3) juegos mientras escuchas música con auriculares. La web tiene infinidad de recursos de aprendizaje desde idiomas hasta masters gratuitos incluyendo libros, vídeos para aprender cualquier cosa y aplicaciones de lo más curiosas para aumentar tus conocimientos. Te lo cuento porque como viajo en transporte público me fijo en que todo el mundo no para de aprender por estos medios.
Bueno, en realidad, en muchos años no he visto literalmente a nadie usar el smartphone para aprender algo. Lo que no quiere decir que alguno tal vez lo haga.
Nunca, nunca, en la historia de la humanidad, ha ocurrido que semejante cantidad de conocimiento esté al alcance de todos. Sin embargo, solo veo que se habla de telebasura, fútbol, política basura y similar porquería mental. Observo que el uso del smartphone, un aparato que me parece mágico, es totalmente infrautilizado, como si usaras una preciosa escultura de porcelana para partir nueces.
Por eso, cuando la gente se queja de que la educación es cara y de poca calidad (cosa que me temo es cierta) no puedo por menos que sonreír con una mueca de pena. No te confundas, hoy en día, aprender es más fácil que nunca, pero siempre será necesario un esfuerzo por tu parte. Eso lo tienen muy claro en Asia y en África, solo les falta el smartphone. Muchos lo usarán para whatsapp y demás usos de las masas, pero miles y miles lo usarán para aprender gratis.
Ésos serán los que te quitarán tu trabajo y serán tus jefes, les sobran ganas. Avisado estás.
Ayer, terminé el curso de actualización de EKG. :D
ResponderEliminarSaludos
En cuanto una se abandona en el aprendizaje, luego cuesta muchísimo el recupera el hábito, pro eso es bueno no perderlo.
EliminarSaludos
Adquirir cultura, leer, aprender cosas con las que te sientas a gusto, visitar museos y exposiciones... no tiene por qué ser caro. Aunque es cierto que algunas administraciones intentan cobrar tasas por todo o privatizar hasta el sol, sigue habiendo bibliotecas públicas donde consultar muchas obras o manejar un ordenador de forma gratuita. Hasta hace poco he sido profesor de un CEPA (Centro de Educación Permanente de Adultos) donde los alumnos no pagaban nada; si bien es cierto que últimamente se han ido recortando algunas opciones, como por ejemplo las llamadas enseñanzas abiertas, Inglés e Informática, manteniendo la prioridad en la Secundaria de adultos y en alfabetización.
ResponderEliminarEn todo caso, leer sigue siendo una de las actividades más baratas que existen. El que no lee es porque no quiere
Un saludo.
A eso quería llegar: que mucha gente permanece embrutecida porque quiere, y todas les excusas que puedan dar y el echar balones y culpas fuera, no cuelan.
EliminarUn saludo