Imagine un mundo sin teclados. ¿Verdad que le cuesta? En el ordenador, en el teléfono, en realidad, en casi todo. ¿Cuándo fue la última vez que escribió a mano? ¿Le costó esfuerzo? ¿Le gustó su caligrafía? He visto textos manuscritos desde finales del siglo XIX y principios del siglo XX y me quedo admirado con la letra con la que escribían , siento una sana envidia de aquellas gentes. Muchos aun viven y escriben igual de bien. Ahora nos quejamos que la letra de los médicos es casi indescifrable, pero vengo observando que cada vez todos escribimos peor. Es difícil encontrar a alguien con una letra bonita y cautivadora y cuando lees una letra elegante, te sorprendes. Son cosas que vamos perdiendo por el camino gracias a los adelantos técnicos y a las nuevas tendencias. Igual que en Europa se perdió el latín a costa del inglés. A veces no sé si avanzamos en algunas cosas. No hace falta ser grafólogo para que un texto manuscrito nos haga sentir cómo es la persona que lo escribe. Si por eje